No le espera un escenario fácil al Urbia Voley Palma en su visita el sábado a Castellón (18:00). El Mediterráneo "se juega la vida", afirmó ayer Marcos Dreyer, en su lucha por la permanencia. El conjunto de La Plana llega en una dinámica al alza con dos victorias en los últimos tres partidos y planteará "un ambiente complicado con un pabellón pequeño que se llenará", indicó el técnico brasileño. "No nos vendrá mal un partido así para llegar competitivos al play-off", afirmó.

Al conjunto mallorquín le falta sumar un punto para asegurar matemáticamente la segunda posición. No obstante ,Dreyer está muy ocupado en "probar novedades para intentar sorprender a los rivales en el play-off". El técnico del vigente campeón es consciente de que, para revalidar el título, sus armas pasan por "la recuperación de Nico Ronchi, la entrada de Joan Perelló o el regreso de Marcelo Hister a su posición", además de "cambiar el chip tras la advertencia que nos llevamos al perder en Teruel". El entrenador del Urbia subrayó que le sirvió para darse cuenta de que "no era suficiente con lo que había si queremos ganar la Superliga".

"El equipo debe seguir creciendo si queremos alcanzar el objetivo", señaló Dyonathan Zóio. "Para llegar lo mejor preparados psoible al play-off hay que hacerlo bien en estos dos últimos partidos", explicó el jugador brasileño, que eludió la presión argumentando que si son "exigentes porque los rivales están a un gran nival", sentenció el receptor.