La batalla campal batalla campalacaecida el pasado domingo en Alaró, con la pelea entre padres del equipo local y del Collerense, ha provocado multitud de reacciones y, sobre todo, un alud de reuniones entre las distintas partes con el fin de atajar un problema que está afectando al fútbol en particular y al deporte en general.

Las más importantes se van a desarrollar a lo largo de esta tarde. De hecho, en la sede de la Unión Deportiva Alaró se encuentra en estos momentos el director general d'Esports del Govern, Carles Gonyalons, que ha acudido al campo municipal para reunirse con los directivos del Alaró y conocer de primera mano lo sucedido el domingo por la mañana y las decisiones que ha adoptado la directiva al respecto.

Hora y media después, a las 18:30 horas, el representante del Govern será uno de los protagonistas de la reunión que se celebrará en la sede de de la Federació Balear de Fúbtol de les Illes Balears, en Son Malferit. También están citados los representantes de los clubes, del Comité de Árbitros y Delegación del Gobierno. El único punto del día es estudiar las medidas a adoptar tras el bochornoso espectáculo de la pelea y cómo atajar este problema.

Pero no acabará ahí la jornada. Al menos para el Alaró y el Collerense, que tienen previsto reunirse esta noche con padres de los jugadores para explicar las medidas y sanciones que adoptaron ayer lunes con respecto a sus futbolistas (el Collerense ha apartado a dos jugadores por estar sus padres implicados en la pelea) y su equipo (el Alaró lo ha retirado de la competición).