El Mallorca vive instalado en la exageración, tanto cuando sale victorioso como cuando cae derrotado. Por eso fue grato escuchar a Javier Olaizola, un hombre propenso a la desmesura, tratando de valorar en su justa medida el triunfo contra el Mirandés. "No hemos hecho nada, no perdamos la cabeza", dijo tras conquistar una victoria vital pero poco lucida ante un rival que se deshace lejos de Anduva. Del partido cabe rescatar la mejoría de un grupo que tocó fondo en Soria y el buen papel de James, un futbolista que tiene aptitudes, pero que solo triunfará con una buena dosis de constancia. Nada más. Sería deseable que los aduladores que merodean por el club se abstengan de convencer a los jugadores de que han ganado al Bayern de Múnich.
Cambio de criterio
El fichaje de Saúl García Saúl Garcíay el enorme interés por incorporar a Álex Gallar son la confirmación de que las preferencias de Maheta Molango han cambiado, no se sabe si por convencimiento o porque la economía del club no da para grandes desembolsos. Hace exactamente un año el consejero delegado estaba convencido de la necesidad de reclutar a futbolistas con nombre y currículum al precio que fuera; ahora en su lista prevalecen nombres desconocidos que cuentan con más futuro que pasado. Hace muchos años que todo son tumbos en una dirección deportiva en la que nadie ha tenido el tiempo, la confianza o el buen juicio de apostar por una idea clara y llevarla a cabo. En todo caso el mercado de invierno no es el más adecuado para fijar la política deportiva de un club. En este caso bastaría con un nivel de acierto superior al del año pasado, que tampoco es tan difícil.
Rampa de salida
Lo normal es que también se produzcan algunas salidas, y la última convocatoria de Javier Olaizola señala a dos futbolistas en particular: Óscar Díaz y Salomao. Ambos, que se quedaron fuera de la lista para medirse al Mirandés, presentan una gigantesca distorsión entre lo que cobran y lo que rinden. Los jugadores con hambre son un bien escaso en la actual plantilla, y el mercado debe servir para corregir dicho déficit. En este sentido, a nadie se le escapa lo mucho que ganaría el grupo sustituyendo a Salomao por James, por ejemplo.
Un aniversario con matices
El proyecto liderado por Robert Sarver y Maheta Molango acaba de cumplir un año. Es obvio que el golpe de timón que dio el consejero delegado en su día en la parcela deportiva no ha dado ningún resultado, pero no por ello hay que poner bajo sospecha todo el andiamaje levantado durante este tiempo por los norteamericanos. Más importante que el 'Player's Lounge' o la resiembra del césped de Son Moix es que la propiedad ha pagado los ocho millones de déficit del pasado ejercicio y hará lo mismo con los cinco millones que se prevén para el actual. La supervivencia de la entidad estará garantizada mientras haya quien siga dispuesto a rascarse el bolsillo para pagar la deuda.
'Tarifazo' de cort a los clubes
Cort va a tener que explicar muy bien por qué en plena temporada deportiva se descuelga con la exigencia de que los clubes se abonen al Institut Municipal d'Esports (IME) para usar sus instalaciones. Este 'tarifazo' estrecha un poco más la soga sobre muchísimos clubes modestos que viven exclusivamente de las cuotas de los deportistas y para los que esta carga -imprevista y muy mal argumentada- es un disparo contra su línea de flotación. El IME justifica la necesidad de la medida para "controlar el acceso" a las instalaciones municipales, una explicación cuando menos chocante. A estas alturas es muy complicado que Cort dé marcha atrás, pero si de lo que se trataba era de cuadrar los números, seguro que había otros apartados en los que recortar.
