El Palma Futsal sigue escribiendo las páginas más ilustres de su palmarés y esta noche iniciará la redacción de un nuevo capítulo: la primera semifinal de su historia en la Copa del Rey. Será en el Palau Blaugrana, a las 21:00 horas (IB3 TV), en el partido de ida de la semifinal ante el F.C. Barcelona Lassa, campeón de cuatro de las cinco ediciones en las que se ha disputado esta competición.

Los mallorquines desafían a otro de los grandes del fútbol sala mundial tras derrotar al actual campeón en la ronda anterior, el Movistar Inter, único equipo que ha sido capaz de ganar a los catalanes esta temporada. El conjunto de Juanito llega a la cita con la confianza de las últimas victorias y del buen momento de forma que atraviesan con tres triunfos consecutivos magnificados por la gesta conseguida ante el Movistar Inter y que respaldan el nuevo reto. La dificultad añadida en esta ocasión es que la eliminatoria se juega a doble partido pero el premio es alcanzar la primera final de su historia.

El favorito es el F.C. Barcelona Lassa pero el Palma Futsal ya ha demostrado de lo que es capaz. El objetivo en este partido de ida es conseguir el mejor resultado posible de cara a la vuelta que se jugará en Son Moix en febrero y en donde el Palma quiere que se decida la eliminatoria con la ayuda y apoyo de sus aficionados.

Desafío mayúsculo

El desafío vuelve a ser mayúsculo. El F.C. Barcelona Lassa solo ha perdido un partido en lo que llevamos de temporada, en la pista del Movistar Inter, es el equipo menos goleado y el que más goles consigue. Además, se ha mostrado intratable en el Palau Blaugrana encajando apenas cuatro goles en cuatro partidos jugados, una cifra considerable. Ahora bien, el Palma Futsal también está registrando unos dígitos que le mantienen en la tercera plaza de la Primera División, justo por detrás de su rival, y precisamente fuera de casa es donde mejor rinde con todos los partidos ganados salvo la derrota de Jaén. Todo ello hace que los de Juanito tengan cargada la moral de cara a esta eliminatoria histórica y que quieren que acabe bien.