El litigio legal contra la UEFA para que el organismo presidido por Michel Platini devuelva la plaza de la Liga Europa al Real Mallorca tiene todavía recorrido, pero a día de hoy es muy improbable que el club siga batallando por una causa que se considera casi perdida. La jueza del concurso de acreedores, María Encarnación González, ha dado un golpe casi definitivo a las aspiraciones bermellonas al declararse incompetente en el conflicto contra el organismo europeo.
El responsable de los servicios jurídicos del club, Miquel Coca, estudiará a fondo la documentación del caso en los próximos días para determinar si el Mallorca tiene alguna posibilidad de éxito en caso de iniciar una nueva ofensiva legal contra la decisión de la UEFA. Pero los ánimos están muy fríos. La magistrada, que hace solo dos meses se caracterizó por adoptar una postura extremadamente beligerante contra el organismo europeo, admite en su escrito que la justicia ordinaria española no es competente para plantear batalla contra una entidad privada que tiene su sede en la ciudad suiza de Nyon. Un argumento que reduce casi a la nada las posibilidades de éxito en un hipotético intento por retomar el litigio.
Contra la decisión de la magistrada cabe recurso ante la Audiencia Provincial, un paso que, según fuentes jurídicas consultadas por este diario, está condenado al fracaso. Sí presenta alguna opción interesante interponer un recurso ante un tribunal de Nyon. Pero los servicios jurídicos del Mallorca no se lanzarán a un proceso jurídico tan complejo, largo y costoso sin la certeza de que puede desembocar en una resolución favorable para la entidad.
La opción de pedir una indemnización económica en concepto de daños y perjuicios está en otro plano. Pero antes de que llegue eso, el club tiene que haber demostrado que el veto de la UEFA no se ajustaba a derecho.
La decepción es absoluta en el club por la defensa que en su día encabezó Javier Tebas y que muchos califican de "fracaso". Atrás queda el estéril intento por recurrir ante el Comité de Apelación de la propia UEFA y la incomprensible decisión de renunciar a defenderse ante el TAS.
El club lamentó ayer en un comunicado "el perjuicio causado a nuestros futbolistas y la frustración que ha supuesto para nuestros aficionados" todo este proceso.
