El Museu de Mallorca se está preparando para reabrir en 2021 las primeras salas de la sección de arqueología, "probablemente sólo serán dos o tres de las doce que existen", explica a este diario la directora del centro, Maria Gràcia Salvà.
Para la responsable, es una "prioridad" empezar a exponer fondos propios de arqueología. "Es el gran reto de la dirección del museo, si es que me quedo yo finalmente después del concurso que se ha convocado", comenta. Estos planes sólo podrá llevarlos a cabo de manera parcial a finales del año próximo "porque es en esta zona donde hay humedades que tienen que ser subsanadas por el Ministerio de Cultura", revela. "Vinieron unas arquitectas de una empresa privada contratadas por el Ministerio y diagnosticaron la procedencia de las humedades en la parte subterránea", relata. Además de este problema, la sección de arqueología tampoco puede abrirse en su totalidad, "porque estamos pendientes también de la museografía y de su financiación por parte del Gobierno. Enviamos el plan museográfico y nos lo devolvieron para retocar algunas cuestiones. Ya lo hemos hecho y ahora volveremos a remitirlo", explica.
Así las cosas, la directora estudiará medioambientalmente con su equipo qué salas podrían reabrirse (llevan muchos años cerradas, en 2015 con la gran reforma no llegaron a reinaugurarse) para organizar muestras temporales. "Haremos mediciones de la humedad y la temperatura para valorar cuáles de ellas están mejor. También hay que tener en cuenta que parte del material arqueológico, como la cerámica, por ejemplo, no es tan sensible como las tablas góticas", apunta. Eso sí, asevera que para los bronces, el hueso y demás metales se adquirirán unas vitrinas estancas y climatizadas que son especiales para este tipo de restos. También subraya que estas exposiciones temporales serán de larga duración "para evitar la desestabilización de los materiales".
Climatización
El sistema de climatización, uno de los talones de Aquiles de Ca la Gran Cristiana, "está estabilizado", comenta Salvà. "Y el sistema informático del mismo también funciona ahora mismo. Además del seguimiento que nosotros hacemos, el Ministerio ya puede hacer el control remoto también", explica. "Ahora hemos contratado una empresa nueva que hace el seguimiento pero estamos con el plan de prescripciones técnicas para contratar el servicio de mantenimiento para varios años", añade.
Las negociaciones con el Ministerio de Cultura para subsanar las humedades, agilizar la museografía de la sección arqueológica y la rehabilitación urgente que necesitan las instalaciones de Muro también "son prioritarias". Aunque Salvà admite "preocupación" porque la pandemia y los problemas económicos que acarrea pudieran retrasar las inversiones necesarias.
El centro que dirige la técnica de museos por la Diputación de Barcelona reabrió sus puertas el pasado 19 de mayo tras el confinamiento. "En estos últimos meses ha venido bastante gente, estoy contenta con las visitas", asegura. "Los recorridos guiados de los jueves a la colección permanente han funcionado", apunta la historiadora del arte de Felanitx.
A partir de octubre, el Museu de Mallorca comenzará con el horario de invierno. Y en algo más de un mes se confirmará si Maria Gràcia Salvà u otra persona del cuerpo de funcionarios públicos consigue la titularidad definitiva de la plaza de dirección.
Secció de Muro
Una usuaria de la Secció Etnològica del Museu de Mallorca, en Muro, subió este fin de semana varias fotografías a las redes lamentando su estado de conservación. La directora del centro reconoció los males de la infraestructura y las "humedades espantosas". "Este invierno vinieron unas técnicas del Ministerio de Cultura, estamos a la espera de su respuesta".
