Jon Bon Jovi pasó la tarde y la noche de ayer en Mallorca, y permanecerá también durante el día de hoy en la isla. El célebre rockero aterrizó en Palma pasadas las 16 horas y llegó al muelle de Paraires hacia las 16.45, donde saludó a los fans que le esperaban en el Norwegian Pearl. El cantante bajó de una furgoneta oscura y subió a bordo del crucero a través de una pasarela. Al pisar puerto, se mostró muy simpático y saludó con la mano en alto a sus seguidores. Muchos de ellos le esperaban en cubierta con pancartas.

Una hora y media después, el artista actuó en el crucero, una actuación en acústico actuación en acústicoprevista en el escenario de la piscina que fue trasladada debida al mal tiempo al teatro de la embarcación. Finalmente, se trató de una doble sesión para que nadie se quedara sin disfrutar de su música.

El concierto se celebró a bordo del Norwegian, que estuvo todo el tiempo amarrado en el Dique del Oeste en lugar de navegar a pocos nudos por la bahía de Palma. Después se produjeron las sesiones de fotos de la estrella con sus fans.

2.400 personas venidas de 53 países diferentes y que han pagado entre 1.500 y 5.000 euros, sin incluir bebidas, se entregan, en este crucero temático, a la idolatría de Jon: todas las pantallas del barco emiten conciertos y reportajes del cantante y de su banda, todos los productos de mercadotecnia se venden con facilidad inaudita y también se disfruta a bordo de la música en directo de otros solistas y grupos, como Slippery When Wet, cuatro artistas que imitan al ídolo de la embarcación, que está a bordo acompañado por su esposa Dorothea Hurley y uno de sus hijos, Jesse, con el que se dedica a producir un vino rosado que también se ha dado a conocer en el Norwegian Pearl.

El plato fuerte del crucero, el gran show (si la meteorología lo permite), está previsto que se celebre hoy de 7 a 8.30 horas en aguas mallorquinas. El barco zarpará a las 18 horas del puerto.