"Mi padre siempre estaba intentando hacer una película, confiesa William Graves. Las motivaciones principales para hacer cine no eran tan artísticas o glamourosas como crematísticas. "Siempre buscaba ganar dinero para poder pagar los gastos que tenía en Mallorca", relata. "En los cincuenta, tuvo varios proyectos para hacer películas, pero ninguno se materializó. Finalmente, aceptó la oferta de un ciclo de conferencias en Nueva York que se convirtió en una buena fuente de ingresos", desvela el hijo.

Paralelamente a su colaboración en el guión de My Majorca, Graves manejó tres propuestas cinematográficas que se frustraron. En 1953, Will Price le propuso escribir un guión sobre Las mil y una noches. Un año después, en Roma, Rossellini iba a dirigir La hija de Homero (un texto de Graves) con su mujer Ingrid Bergman, pero se separaron. En el 56, Alexander Korda le volvió a proponer rodar Yo, Claudio. Esta vez con Alec Guinness como protagonista. El intérprete llegó a trasladarse a Deià para trabajar en otro guión con el escritor.

Graves fue siempre un foco de atracción para el mundo del cine. Gracias a él pasaron por la isla estrellas como Tony Richardson, Peter Bogdanovich, Linda Christian, Tyrone Power, Peter Ustinov o Gina Lollobrigida (por entonces, también periodista). Pero fue la visita de Ava Gardner la que provocó un auténtico terremoto en Deià.

La actriz aterrizó por primera vez en Mallorca en 1956, cuando los Graves vivían en Palma. Más tarde, en julio de 1959, Ava también pasó unos días en Sa Guarda, la casa del espía Ricardo Sicre en Llucalcari, coincidiendo con la fiesta de cumpleaños de Graves. El animal más bello del mundo invitó a bailar a un guardia civil quien, atento a las exigencias del uniforme y su deber, no cayó en la tentación porque estaba de servicio.

En los cajones del escritor británico, se quedaron otros relatos que aspiraban a convertirse en carne de metraje. William menciona el cuento Está en su casa, sobre un suicida y sus vivencias en la Guerra Civil. "El guión ya está escrito, ésta sería una película preciosa", opina.

En el montante de proyectos abortados, también consta el de levantar una producción de Broadway sobre la Reina de Saba, personaje que sería protagonizado por Lana Turner.

Pese a la nómina de fracasos, Graves pudo ver cómo en 1976 veía al fin la luz un proyecto audiovisual sobre su célebre novela Yo, Claudio. Una serie de trece episodios con guión de Jack Pullman producida y emitida por la BBC. Su relato El grito (con John Hurt) también saltó a la gran pantalla en 1978. "De esta época hay otro guión en el cajón, Todas las cosas para todos los hombres, basada en la vida de San Pablo. En los 60 trabajó también para la película Lawrence de Arabia, pero pronto se peleó con el productor Sam Spiegel porque éste le estaba utilizando", relata el hijo.

En la base de datos digital IMBd, se recopilan otros trabajos del poeta inglés. En concreto, su participación en el guión de la película Las amazonas (1973), dirigida por Terence Young. Llama también la atención el papel de extra que interpretó para la cinta Angustia mortal, filmada en Mallorca en 1967. En el rodaje coincidió con el gran Michael Caine.