La Secció d'Arqueologia del Col·legi Oficial de Doctors i Llicenciats en Filosofia i Lletres i en Ciències de les Illes Balears remitió el pasado viernes una carta (se puede leer completa en la web de este diario) en la que insistía en que los problemas del Museu de Mallorca "no se limitan a las dificultades para entregar nuevos materiales recuperados en las numerosas intervenciones arqueológicas de la isla".

"Como mínimo, en los últimos 15 años, el Museu ha incurrido en dejadez de sus funciones, atendiendo que no sólo no promueve la investigación, sino que dificulta la investigación de los profesionales interesados en estudiar los materiales de los fondos del museo; que no hace difusión del patrimonio, sino que mantiene el centro con las salas de arqueología cerradas hace nueve años y prácticamente sin visitantes; que permanece aislado de la sociedad de la cual forma parte y en la vida de la cual debería participar activamente", recoge el comunicado.

El colectivo expresa también su preocupación por las deficiencias detectadas en el museo en relación a la conservación de algunas piezas que se custodian. "Estos hechos coincidieron en el tiempo con un momento de relevo en la dirección del centro que implica no sólo un cambio de personas, sino también en la manera de entender y gestionar esta institución, y que se recibió positivamente por gran parte de nuestro colectivo por suponer el final de un largo periodo de crispación con la anterior dirección".