Por primera vez, las empresas culturales y creativas dedicadas a la producción de contenidos artísticos en Balears han decidido agruparse y defender sus intereses en un frente común. El resultado lleva por nombre Crea, una plataforma que aglutina a 72 empresas que trabajará por dar representavidad y visibilidad al sector. Su primer objetivo: poder participar en la ley de industria que elabora el Govern.

"Queremos establecer un diálogo leal y serio con las administraciones para colaborar y acordar políticas públicas que, de verdad, se destinen a mejorar los diferentes sectores de la cultura y de la ciudadanía de Balears", explicaron ayer sus representantes en Xocolat.

La plataforma está formada por seis asociaciones empresariales: la Associació de Productores Audiovisuals de Balears, siete discográficas (Ona Edicions, Digitals Pro, Espora, Runaway, Satie, Aumón y Blau), otras tantas editoriales (El Gall, Olañeta, Lleonard Muntaner, El Tall, Documenta Balear, Ensiola y Edicions Perifèrics), Art Palma Contemporani y la Associació Independent de Galeries d'Art.

"Desde la administración -señalan- se pueden impulsar los procesos creativos en otros aspectos que no sean estrictamente las ayudas directas, las subvenciones, como el acompañamiento de los proyectos de producción, potenciar la proyección y la difusión, financiar los proyectos, los créditos retornables... Necesitamos un marco legal de la comunidad autónoma y lo necesitamos en forma de ley que regule el sector económico de la cultura".

Para el colectivo Crea, hace falta una intervención pública que regule, "sin improvisar, con objetivos claros de servicio público, que no sea invasiva ni autoritaria. Una intervención planificada y consensuada con los diferentes sectores culturales. Por eso se necesita un plan de cultura de la comunidad con el que fijar las líneas maestras indispensables para alcanzar objetivos ambiciosos", subrayan.

Entre estos objetivos figuran "internacionalizar nuestra cultura", "corregir las tendencias homogeneizadoras en los ámbitos de la comunicación y la cultura" y enlazar las empresas de los diferentes sectores culturales "para favorecer el conocimiento mutuo y el intercambio en disciplinas cada vez más interconectadas entre ellas, y con la ciudadanía, de la cual son parte".

Minifundismo

El actor, director y gestor teatral Carles Molinet, en calidad de vocal de Crea, recordó que en Balears "hay empresas pequeñas en cada sector de la industria cultural, a menudo empresas débiles y que, en la mayoría de ocasiones, se dedican al minifundismo. No hay un tejido fuerte y esto va en detrimento de nuestra producción y proyección cultural".

Molinet, que estuvo arropado por Antoni Triay, de la Associació Productores Audiovisuals de Balears, y el editor Gracià Sánchez (El Gall), remarcó que "la posibilidad de una ley que incorpore a las empresas culturales y creativas es esencial. El objetivo tiene que ser impulsar el desarrollo de estas empresas baleares para favorecer la dinamización y la consolidación de los subsectores culturales".