James Rhodes es un superviviente de su propia historia cuya vida está llena de cicatrices. Algunas físicas, ya sanadas, fruto de la época en que se cortaba con una cuchilla de afeitar. Las otras tienen un origen más macabro, provocadas por las reiteradas violaciones de su profesor de boxeo. Heridas, psicológicas en su mayoría, aparentemente cerradas. Pero más allá de su tortuosa historia, que plasma sin florituras en la autobiografía Instrumental. Memorias de música, medicina y locura, Rhodes es un músico brillante, aunque él diga lo contrario. Ha tocado en los auditorios más exquisitos del Reino Unido y también de gran parte del mundo. La música no es su vida, sino que su vida es la música.

Para entender a James Rhodes primero hay que comprender las circunstancias de su historia. Una historia que empieza con un niño de cinco años en la escuela primaria de Arnold House, un colegio privado para chicos situado en St. John’s Wood, Reino Unido. Comienza en la escuela, pero sobre todo en la clase de gimnasia de Peter Lee. Profesor del centro que al principio era amable con el pequeño y le hacía sentirse especial. Pero la tortura que cambió a James empieza en el club de boxeo.

Durante cinco años Peter Lee le violó de forma reiterada. Esa experiencia le convirtió en carne de psiquiátrico. Fue drogadicto, alcohólico y se intentó suicidar cinco veces. Pero la música le salvó la vida. Más concretamente la Chacona de Johann Sebastian Bach. La música fue su terapia y el piano la medicina que debía tomar. Pues según él, le lleva a “ese lugar feliz en el que todo desaparece”. También la escritura, a la que le dedica casi tantas horas como al piano, es un bálsamo tranquilizante para el artista. En parte porque acostumbra a escribir sobre música. Y es que aunque no lo parezca, ese el tema centra de Instrumental. Es una autobiografía, pero también un libro de música.

La vida de James Rhodes gira en torno a su trabajo como instrumentista. Y este domingo, a las 20 horas, el instrumentista actuará en el Trui Teatre. Un concierto organizado por Jazz Voyeur. Pero como la escritura también es parte de él, este sábado presentó su autobiografía en la Feria del Libro. También firmó ejemplares de Instrumental en el stand de El Corte Inglés y aprovechó para promocionar su concierto.