La propuesta se había presentado como una gran producción y la verdad es que no era para tanto. Algunos, pocos, decorados y transparencias, y una escalinata definían esa producción del Teatro Nacional Sao Carlos de Lisboa de Macbeth que el Teatre Principal de Palma propone como estreno de su trigésimo primera temporada de ópera.
Movimientos lentos de todos los protagonistas, coro incluido, abuso de telones que reducen el espacio, una iluminación demasiado oscura y un vestuario que nada aporta (ridículos los soldados escoceses), hacen que ese Macbeth sea poco interesante, teatralmente hablando. Nada está mal, pero nada destaca. Una producción que pasará sin pena ni gloria, poco innovadora, ambientada en la época medieval, más a la manera de Juego de tronos que al estilo Braveheart.
La Orquestra, sin brillar al máximo, fue lo mejor de la parte musical. Empezó un tanto titubeante, pero el director supo reconducir su sonido para que fuera de menos a más. Todas las secciones, incluida la banda interna, sonaron bien. Sin sobresalir, pero de forma profesional. Como también profesionales fueron los solistas vocales. Ninguno, pero, destacable por su excelencia. Dario Solari cantó un papel protagonista de forma solamente correcta, sus dudas y obsesiones salieron poco a la luz, tampoco le ayudó ni la escenografía ni el vestuario. Maribel Ortega tiene una voz demasiado lírica para esa Lady Macbeth, una mala malísima, un personaje que necesita una voz con más cuerpo, tanto en los agudos como en los bajos. Ruben Amoretti cantó un interesante Banco, aunque en la tesitura más alta parecía sentirse menos cómodo. Arseny Yakovlev tiene buena voz para Macduff, papel que resolvió de forma correcta, así como hicieron lo propio los mallorquines Natalia Salom, Antoni Lliteres y Joan Miquel Ribot.
Por lo que al coro se refiere decir que no defraudó en esa obra en la que tiene mucho protagonismo, sobre todo las voces femeninas que supieron resolver dignamente las escenas de las profecías y aquelarres.
En definitiva, un anodino inicio de temporada, sin nada negativo que objetar, aunque sin excelencias destacables.
Macbeth de G. Verdi
Teatro Principal de Palma
***½
Solistas vocales
Orquestra Simfònica de Balears
Coros del Teatre Prinicpal
Temporada de ópera
Elena Barbalich, dirección escénica
Andrés Salado, dirección Musical
05-03-17
