Al Atlético Baleares le quedan cinco jornadas para cerrar el primer tramo de la competición y tanto el técnico Jordi Roger como los jugadores son conscientes de que no está permitido ningún tropiezo. “Quedan cinco partidos y son cinco finales”, ha reconocido este mediodía el preparador catalán, con las vistas ya puestas en el encuentro que afrontan este domingo (12 horas / Footters) frente al líder Sanse

“Vamos a pensar en la del domingo, que es la que tenemos más cerca. Hemos trabajado muy duro estos días para eso y estoy convencido de que vamos a sacar un resultado positivo de allí. Tenemos capacidad para ganar a cualquiera, pero también es verdad que si no competimos al 100%, nos puede pasar por encima cualquier equipo. La liga está muy igualada y vamos al campo del mejor equipo”, ha analizado Roger tras el entreno que ha protagonizado el equipo en el Estadi Balear.

Para la cita ante los madrileños, el técnico blanquiazul no podrá contar con el centrocampista Alfonso, de baja por una lesión en la rodilla, y con el central Olaortua, quien fue sancionado con doble amarilla en el último encuentro frente al DUX. A quien sí podrá alinear el catalán es al miembro del plantel que ha pasado por el Covid en las últimas semana y que ha provocado el aplazamiento de los dos últimos encuentros del Baleares: “Lo ha pasado como una gripe. Perdió un poco el olfato y el gusto, pero está bien. Regresó el sábado y le hemos ido dosificando en los entrenamientos poquito a poquito, pero está bien. Trabaja con total normalidad.

Los parones por la pandemia, la Navidad y la nieve han provocado que esta temporada haya sido “rara de la hostia”, pero Roger no ha querido buscar excusas en ese hecho. “Es una Liga totalmente diferente. ¿Que cuánto nos está afectando? Si digo que mucho, me van a decir que pongo excusas y si digo que poco, me dirán otra cosa. Nos ha afectado lo que nos tiene que afectar, pero como al resto de equipos que también han parado. Este año nos ha venido como nos ha venido y ya está. Nos quedan cinco partidos y estamos a tiempo de todo”, ha señalado optimista.

"Lo que tenemos claro es que tenemos que mejorar muchísimo respecto al último partido que hicimos en DUX porque así no ganamos a nadie. Somos conscientes de eso. Partiendo de esa base, vamos al campo de un equipo que va líder, que solo ha perdido dos partidos, que tienen unos números brutales y esta ahí por méritos propios. Saben a lo que juegan y saben lo que hacen", ha analizado.  

Cuestionado por la presión que siente el equipo, Jordi Roger ha sido muy claro: “En el fútbol no hay presión, en el fútbol hay responsabilidad. La presión es para el que trabaja 10 horas y no llega a final de mes para dar de comer a sus hijos, eso sí que es presión. Nosotros somos unos privilegiados. Trabajamos en lo que nos gusta que es jugar a fútbol. No hay presión en el fútbol, hay responsabilidad y eso lo tenemos”.

El entrenador del Baleares no ha querido poner una nota al equipo si finalmente no se consigue el objetivo de entrar en los puestos de promoción de ascenso. “Las notas, para final de curso. Entonces valoraré todo, pero hasta que no pasen estos cinco partidos, no puedo anticiparme”, ha zanjado.