Diario de Mallorca

Diario de Mallorca

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Gente en la sombra

Juan López Castillo: "Entrenaré hasta que el cuerpo me diga basta o no me quieran"

"Un entrenador no tiene edad. Tengo la misma o más ilusión que el primer día. Me encuentro en condiciones para dirigir a equipos y aquí estoy"

Juan López Castillo posa en medio del campo del Pòrtol este pasado domingo antes de enfrentarse al Sant Marçal.

­­Lleva casi toda la vida en los banquillos, y es que le apasiona dirigir equipos de fútbol. Es de la vieja escuela en la que la disciplina, respeto y orden son fundamentos básicos y esenciales para triunfar como entrenador y, como asegura, también en las facetas de la vida. Cuando se pensaba que había acabado su periplo como técnico al contar con 74 años, una llamada de un “compromiso” le ha vuelto a sentar en la banqueta. Es Juan López Castillo (Palma, 1941), entrenador del Son Ferrer de Segunda Regional.

-74 años y en los banquillos dirigiendo a jóvenes futbolistas.

-Un entrenador no tiene edad. Tengo la misma o más ilusión que el primer día. Me encuentro en condiciones para dirigir a equipos y aquí estoy.

-Y en una plaza complicada, Segunda regional, y con muchos jugadores que ya están de vuelta.

-Estoy en el banquillo del Son Ferrer porque es un compromiso que tengo con el presidente del club. No queremos que descienda este equipo y me han pedido encarecidamente que lo intente. En eso estamos. Quiero cumplir lo que me han pedido, no será fácil pero esperamos que la nave llegue a buen puerto.

-Dice que no será fácil pero usted debe estar ya curtido en mil batallas.

-Sí, pero será muy complicado porque me he encontrado con un conjunto desestructurado y que no estaba acostumbrado a entrenar. He dado ya siete bajas de jugadores y hemos fichado a unos cuantos a ver si salimos -son colistas y todavía no saben lo que es ganar un partido-. La primera y clara finalidad es hacer un equipo, un bloque. Ni se ha hecho pretemporada, por eso este conjunto solo recibe goleadas. Ahora poco a poco nos parecemos a un cuadro de fútbol, cosa que antes no lo era.

-¿Qué conceptos básicos considera usted con su veteranía que son fundamentales en un equipo?

-Lo primero es una buena preparación física para poder responder y competir, si no no puedes competir sobre el terreno de juego. Aquí es donde tenemos más problemas ya que como no ha habido una preparación previa ahora nos cuesta mucho jugar. Eso es fundamental. También una disciplina, un orden e ilusión en querer hacer las cosas bien.

-Sus últimos equipos fueron en fútbol base. Ahora pasa usted al fútbol amateur.

-En mi vida deportiva he entrenado tanto a hombres como a niños. Sí puedo decir que hay mucha diferencia. No ya por las personas en sí, que también las hay, sino principalmente por la categoría. En juvenil o fútbol base, donde entrené la última vez con el Cide de Preferente, la categoría está más o menos estructurada. Aquí no. La Segunda regional es una categoría perdida, sobretodo este equipo. Por esto estoy aquí para poner orden y sacar adelante lo encomendado. Es el compromiso que tengo con el presidente. Queda todavía mucha competición y queremos salvarnos en un grupo muy duro que combina fuerza con técnica.

-¿Cómo lo ha hecho para fichar a futbolistas para jugar en Segunda regional?

-Muy sencillo, por compromiso conmigo. Gente que confía en mí y que no tenía equipo se ha comprometido a ayudarme.

-¿Se acuerda cuándo empezó a entrenar?

-Ufff -resopla-. Hace mucho tiempo. Ya no me acuerdo. Creo que fue a finales de los años sesenta. Una cosa sí que diré, siempre he estado de una manera u otra vinculado al mundo del fútbol. Empecé a entrenar en el Rotlet Molinar. Luego he estado en el Campos, Verge de Lluc, Cide y, entre otros, Collerense.

-En todo este tiempo, ¿qué momento ha sido el más alegre?

-Cuando firmé con el Collerense de Preferente. Dio la casualidad que las circunstancias no eran nada favorables ya que no teníamos campo al tener que compartirlo con otros equipos y la plantilla estaba rota. Para firmar a un jugador teníamos muchos problemas ya que nadie quería venir. Estábamos en Preferente pero parecía que era Tercera regional. Los chavales fumaban porros y ni entrenaban. Cogí diez jugadores nuevos y perdimos los primeros partidos. Cundió el desánimo pero poco a poco fuimos ganando hasta jugar la fase de ascenso. La jugamos y la ganamos ante el Andratx. Subimos a Tercera. Fue una alegría inmensa.

-¿Hasta cuándo?

-Entrenaré hasta que el cuerpo diga basta y la gente y los clubes quieran. Yo me veo entrenando con los años que haga falta. Estoy físicamente bien. Llevo ahora una muleta porque me caí de una escalera para coger ropa. Pegué un patinazo que no veas y me lastimé en la rodilla.

-¿A qué entrenadores admira?

-Me gusta y siento devoción por Vicente del Bosque. Es un técnico serio y que es muy disciplinado. También al maestro Luis Aragonés, ese sí que era un referente, el no va más. Lo añoramos mucho.

Compartir el artículo

stats