Hagamos un poco de historia. Manacor, es el segundo municipio de Mallorca en cuanto a la extensión pero también por su población La capital, del mismo nombre que el municipio es el centro industrial y comercial del Levante de la isla. Desde 1912 posee el título de ciudad. Los primeros indicios de ocupación humana, en los territorios que hoy en día ocupan el término municipal de Manacor, se remontan a la época pretalayótica Hasta hoy, culturas muy diversas han pasado por el municipio, griegos, romanos, árabes y los que vinieron después con la conquista cristiana y ya en la época contemporánea con el turismo y la inmigració que han cambiado gran parte de la estructura de la ciudad y su entorno. Toda esta historia y sus restos pueden visitarse en el Museo de Historia en la Torre dels Enagistes. Hay indicios de que el núcleo de Manacor existe desde el siglo XIII y adquirió el estatuto de villa en el año 1300. La economía se basaba en la agricultura y la ganadería aunque también los sectores textil y de alimentación tenían cierta importancia. Desde la segunda mitad de siglo aumenta la construcción de muebles. La fabricación de muebles de calidad es la segunda industria más importante el municipio de ahí que tenga importancia la intervención de Brunet arquitectes en un local emblemático reconvertido, reciclado, por el cambio económico producido en los últimos años.
En esta ocasión les presentamos una intervención para un centro de entrenamiento, situado en plena ciudad. El centro se ubica en un antiguo taller de carpintería, un espacio donde se compartía vivienda con el propio taller, algo muy habitual entonces aunque hoy nos parezca extraordinario. Se entraba en el taller por un pasadizo a través de la vivienda, ya que entonces todos los tablones se entraban a mano. También era un buen entrenamiento ese ejercicio de cargar a brazo tablones que pesan muchos kilogramos por lo que lo que hoy se ejerce en el interior es simbólico de ese trabajo duro realizado durante tantos años. Un homenaje al esfuerzo.
Muchos talleres de carpintería se han quedado obsoletos en Manacor, que fue la comarca histórica del sector de la madera, y muy especialmente del mueble. Han sido muchas las causas del desvanecimiento casi total del sector (falta de renovación y de actualización, inversión nula en I+D+I, cambio generacional, cambio competencial€ y por supuesto la crisis global que ha generado un drástico cambio en las tendencias y prioridades de los usuarios).
Para los diseñadores de la reforma del local, el despacho de arquitectos Llorenç Brunet i Associats, la empresa "Laboratori 22" que impulsó la reforma es un buen ejemplo de cambio de uso de estos edificios. En la sala dónde se ubicaban las lijadoras, fresadoras, cepilladoras y demás instrumental de carpintero ahora encontramos pesas, cuerdas, cintas.... Ha cambiado la maquinaria pero la sala es la misma y las dimensiones adecuadas para el nuevo uso.
Toda la intervención se concentró en tres temas fundamentalmente. Por un lado limpiar y quitar elementos hasta el mínimo, por otro el uso del patio central y finalmente realizar un lavado de cara a la fachada de acceso. En el volumen principal ya construido, se limpió la planta de la sala dejando sólo la estructura vertical y las cubiertas inclinadas, donde se abrieron unos lucernarios para dotar de una luz homogénea y cenital a la zona de entrenamiento. Se utilizó un pavimento continuo de color oscuro que contrasta con el blanco de paredes y techo, y con el color característico del centro en los pilares.
Se pintó la fachada de acceso dejando la composición clásica de vivienda de medianos siglo XX y se reorganizó el patio central con las rampas de acceso a la sala principal y dejando desnudas todas las medianeras de marés. Éste patio, que se reconvierte en el centro de atención del edificio es el nexo de unión entre la zona de entrenamiento y el acceso, donde la vida social tiene un papel fundamental. Como antiguamente.
