La fiscalía reclama penas que suman 19 años de prisión para un joven español por abusar sexualmente de dos niñas de seis y nueve años, respectivamente, en su domicilio en Inca.
El sospechoso, de 30 años y que permanece encarcelado desde febrero de 2017, está acusado también de un delito de elaboración de material pornográfico utilizando a menores por presuntamente conseguir que la víctima de nueve años le enviara fotografías y un vídeo de contenido sexual a través de la aplicación telefónica WhatsApp, después de que él se lo solicitara. El acusado, por su parte, también le remitió a la menor imágenes y grabaciones en las que aparecía desnudo en la ducha tocándose los genitales, así como mensajes con proposiciones sexuales.
Además de la solicitud de condena de 19 años, el ministerio público solicita para él la medida de libertad vigilada durante ocho años, su inhabilitación para ejercer cualquier profesión con contacto con menores por un periodo superior a cinco años, la prohibición de aproximarse y comunicarse con las víctimas también durante un tiempo superior en cinco años al de la duración de la pena de prisión y una indemnización de 20.000 euros para cada una de las perjudicadas por los daños morales causados.
El juicio contra el sospechoso está previsto que se celebre la semana que viene en la Audiencia de Palma. El tribunal de la sección segunda será el encargado de enjuiciar el caso.
Los hechos ocurrieron entre 2016 y principios de 2017, cuando el acusado residía junto con sus padres en el domicilio familiar en Inca. Esa vivienda era frecuentada por una niña de seis años, que era la hija de la pareja sentimental del hermano del encausado. También acudía con asiduidad otra menor, de entre ocho y nueve años, que era amiga y vecina de la familia.
Según la fiscalía, en ese periodo de tiempo, el sospechoso en reiteradas ocasiones sometió a tocamientos íntimos a las niñas bien en el garaje de la casa bien en su propio dormitorio. También se bajaba él su ropa interior y supuestamente hacía que las víctimas le tocaran en su zona genital. El ministerio público destaca que el joven se prevalía de la diferencia de edad existente, así como de la relación de confianza que tenía con las niñas fruto de las relaciones de parentesco, amistad y vecindad que les unían.
Entre el verano de 2016 y principios de 2017, siempre según la tesis del fiscal, el acusado contactó con la menor. de nueve años a través de WhatsApp y durante las conversaciones que mantenían le solicitó fotografías y vídeos de ella desnuda o en la ducha, o bien de contenido sexual. La víctima accedió en alguna ocasión y le envió fotos e incluso un archivo de vídeo erótico.
El joven sospechoso también mandó a la niña fotografías y vídeos de él desnudo en la ducha tocándose los genitales, así como frases con proposiciones sexuales. Por estos hechos, un juzgado de Inca acordó a mediados de febrero de 2017 que el encausado ingresara en prisión provisional sin fianza.
