La Policía Nacional ha desarticulado una red que explotaba a transexuales venezolanos, captados en concursos de belleza en su país, en Palma y Barcelona. Los investigadores han detenido a 14 personas y liberado en ambas ciudades a 24 víctimas, hacinadas en condiciones infrahumanas y obligadas a ejercer la prostitución a todas horas y ofrecer drogas a los clientes para saldar una deuda de 15.000 euros. Según las pesquisas, los miembros de la organización habrían ganado más de un millón de euros durante los últimos cinco años con estas prácticas.

El entramado estaba formado por tres grupos diferentes. Uno de ellos se encargaba de captar a las víctimas en certámenes de belleza de transexuales celebrados en Venezuela. La mujer que lideraba esta banda les dibujaba un prometedor futuro en España, ejerciendo la prostitución en condiciones inmejorables. Para convencerlas, les mostraba las propiedades que tenía en su país y les prometía grandes beneficios. Una vez aceptaban la oferta, les financiaban los implantes de aumento de pechos y todos los gastos del viaje.

El panorama que se encontraban las víctimas cuando aterrizaban a España era muy diferente al prometido. Al llegar, los miembros de la organización les informaban que habían contraído una deuda de 15.000 euros y les retiraban la documentación.

Uno de sus destinos era un inmueble situado en el número 39 de la calle Villalonga, en la barriada de Santa Catalina, en Palma. El inmueble estaba controlado por un transexual, que tenía a dos encargados a sus órdenes y obligaba a las víctimas a ofrecer sus servicios sexuales durante 24 horas y les imponía un sistema de multas por no cumplir con sus exigencias. Las prostitutas vivían hacinadas y en condiciones insalubres, en habitaciones repletas de literas, sucias y con humedades, aunque las estancias donde ofrecían los servicios estaban mucho más cuidadas. Además, eran obligadas a suministras drogas y fármacos a los clientes. La Policía llevó a cabo el pasado 11 de julio un registro en el inmueble, como informó DIARIO de MALLORCA, y arrestó a los responsables del prostíbulo.

Las víctimas vivían hacinadas y en condiciones infrahumanas. C.N.P.

El tercer grupo actuaba en Barcelona y estaba liderado por un italiano y un español, que contaban con la ayuda de otras cuatro personas para explotar a las víctimas en un piso. La Policía destaca que uno de los implicados actuaba como taxista, llevando a los transexuales a hoteles y domicilios y facilitando el pago de los servicios con tarjeta mediante un terminal TPV.

Los agentes encargados de la investigación estiman que cada una de las 24 víctimas liberadas en Palma y Barcelona generaba unos 4.000 euros mensuales de beneficio para los miembros de la red. En el último lustro, habrían amasado más de un millón de euros con la explotación de los transexuales.

Dinero, drogas y documentos incautados por la Policía. cnp

La operación contra este entramado se ha saldado con la detención de 14 personas. En los registros llevados a cabo en ambas ciudades, la Policía se incautó de 3.000 euros en efectivo, drogas y útiles para su manipulación, fármacos y documentación y material informático.

Esta operación se enmarca dentro del Plan de la Policía Nacional contra la Trata de Seres Humanos con Fines de Explotación Sexual, puesto en marcha en 2013. Desde entonces se han realizado 1.400 operaciones en toda España, con más de 3.400 detenidos y más de 1.900 víctimas liberadas.