Al menos una decena de alumnos de una autoescuela mostraba una familiaridad inusual con el trazado a la hora de realizar la prueba práctica del carné de conducir. Todos, por supuesto, aprobaron. La Guardia Civil ha detenido a un funcionario de la Jefatura Provincial de Tráfico de Balears y al profesor de una autoescuela de Palma, con el que supuestamente actuaba en connivencia, por un presunto delito de cohecho. Los aspirantes también fueron arrestados por comprar la prueba por unos 300 euros.
La investigación de la Guardia Civil de Algaida se inició el pasado mes de marzo. En el transcurso de la misma, los agentes del Instituto Armado averiguaron que una serie de exámenes prácticos para obtener el carné de conducir podrían estar comprados.
Como consecuencia de las pesquisas, los efectivos del Instituto Armado activaron la denominada ´Operación Cervos´. Un funcionario de la Jefatura Provincial de Tráfico de Balears, encargado de examinar a los aspirantes para obtener el carné de conducir, se perfilaba como sospechoso de estar amañando las pruebas.
El empleado público actuaría en supuesta connivencia con un profesor de una autoescuela de Palma. Este, a su vez, se encargaba de suministrarle alumnos dispuestos a pagar 300 euros para superar la prueba práctica sin dificultad.
En los días previos a la prueba, estos alumnos realizaban los recorridos en coche sobre los que posteriormente se iban a examinar para obtener el permiso de conducir. Así se familiarizaban con el trazado y el día del examen lo realizaban sin la menor dificultad y sin cometer el menor fallo.
El profesor de la autoescuela hacía de enlace entre el funcionario de Tráfico con estos alumnos. Una vez que los aspirantes habían abonado la correspondiente mordida de unos 300 euros, uno y otro se repartían el montante del dinero obtenido.
La Guardia Civil contó con la colaboración de la Jefatura Provincial de Balears para tratar de esclarecer esta trama de compra de exámenes de conducir. De hecho, no se descarta que se produzcan más detenciones en relación a estos hechos.
La fase de explotación de la ´Operación Cervos´ culminó ayer con la entrada y registro de dos sucursales de la Autoescuela Express. Una situada en la calle Aragó y la otra en la calle Manacor. Ambas en Palma.
Los investigadores de la Guardia Civil sacaron abundante documentación para cotejar los testimonios recabados sobre la supuesta compra de exámenes prácticos para obtener el carné de conducir con dichos documentos.
La actuación de los efectivos del Instituto Armado, a primera hora de la mañana, causó un importante revuelo entre muchos curiosos que se interesaban por saber qué ocurría.
A raíz de esta operación, Autoescuela Express emitió ayer un comunicado en el que expresaba su "total colaboración" con la Guardia Civil y con las autoridades judiciales en esta investigación.
La academia para aprender a conducir negó taxativamente que la irrupción de los agentes en las oficinas estuviera relacionada con "publicidad engañosa, fraude, falsificación o sobre las condiciones laborales de los actuales trabajadores". Asimismo, la empresa indicó que la actividad se había restablecido y pidió disculpas a los clientes.
