El Ayuntamiento de Palma ha precintado un edificio del barrio del Sindicat, en el centro histórico de la capital, tras sufrir un derrumbe parcial de la fachada ayer por la mañana. Técnicos del departamento de Seguridad de los Edificios revisaron el inmueble ayer a mediodía y dieron orden de desalojar y precintar el bloque de viviendas, situado en la calle de la Gerreria, 10.

Según el consistorio palmesano, en el edificio solo había una residente. Como tiene familia, no solicitó ser trasladada a un albergue municipal mientras duren las obras de adecuación del inmueble. Según el sargento de los Bombers de Palma Pep Toni Far, también era habitual que hubiera ocupas en la finca, aunque en el momento del desplome nadie dormía en el interior de las viviendas.

Se trata de un edificio catalogado que fue construido en 1767 y tiene cuatro viviendas. En el año 2010 se sometió a la inspección técnica de edificio, que detectó graves deficiencias y recomendó varias reformas con carácter urgente. Sin embargo, fuentes de Urbanismo explicaron que los propietarios no se ponen de acuerdo desde hace años en el pago de las obras que se deben acometer por razones de seguridad.

Los funcionarios de Urbanismo revisaron el edificio después de que ayer a las seis de la mañana se desplomaran por sorpresa parte de la cornisa del tejado y de uno de los balcones de la fachada.

Según el bombero Far, "la antigüedad del edificio y la falta de mantenimiento, agravados por las lluvias de los últimos días" son las causas más probables del derrumbe. "Este tipo de fachada absorbe mucha agua, aumenta de peso y llega a colapsar por falta de mantenimiento", agregó el técnico.

Los desprendimientos no causaron heridos, pero sí provocaron un gran estruendo que despertó a algunos vecinos que se asomaron por los balcones. Un vigilante de seguridad alertó al servicio de emergencias 112. La Policía Local llegó en seguida al lugar y los vecinos les advirtieron de que podría haber personas dentro del edificio. Los agentes accedieron a algunos de los pisos, pero no encontraron a nadie dentro.

Luego llegaron los Bombers de Palma del parque de sa Teulera, con un gran camión grúa y terminaron de derribar la parte del tejado y del balcón caídos para prevenir nuevos desprendimientos. También colocaron una malla de seguridad y unas maderas para contener una futura caída accidental de cascotes, debido a que la cubierta está en mal estado.

También se movilizó una ambulancia del 061 para el supuesto de que se hallara algún herido y una brigada de Emaya que recogió los escombros del accidente. Hacia las once de la mañana terminaron los trabajos y se reabrió la calle al tráfico.

Una testigo del incidente

En el momento del siniestro, la única persona que estaba por la calle era Isabel B. S., una jubilada vecina de la zona que estaba paseando a su perra Nara. Explica que no se levantó polvo cuando cayeron los trozos de fachadas, pero la calle se llenó "de maderas, hierro, cemento y ladrillos".

"No he muerto aplastada por dos minutos. Estaba en la esquina con la plaza Quadrado y mi perra me ha estirado hacia atrás. De repente he oído mucho ruido. Me pensaba que era un camión de Emaya recogiendo el cristal, pero luego he visto el edificio", narra la mujer.

La Policía Local vigiló el edificio durante toda la mañana y después mantuvo las vallas alrededor del bloque de pisos por prevención.