Un fraude a Hacienda y a la Seguridad Social de 1,3 millones de euros, una deuda a un banco de 400.000 euros, alzamiento de bienes, explotación sexual de 23 mujeres y contra los derechos de los trabajadores. La Policía Nacional detuvo a Luigi Carlo de M., un alemán dueño del prostíbulo Globo Rojo de Palma, a su esposa, a un portero y a otro empleado por todos estos delitos.
La investigación partió de agentes de la Unidad Contra Redes de Inmigración y Falsificación (UCRIF) de la Brigada de Extranjería de la Policía Nacional. Las pesquisas desvelaron que el propietario del conocido prostíbulo palmesano, pese a su desahogado tren de vida, mantenía una abultada deuda con el fisco.
Hacienda reclamaba al dueño del Globo Rojo el pago de dos sumas de 800.000 y 300.000 euros.
Mientras, la Seguridad Social le solicitaba el pago de casi 200.000 euros. Mientras, una entidad bancaria le instaba a que le abonara la suma de 400.000 euros pendiente de un préstamo.
Pese a esta abultada deuda, el propietario del Globo Rojo conducía un deslumbrante Bentley descapotable último modelo valorado en unos 300.000 euros y poseía un suntuoso chalé en una zona privilegiada de Camp de Mar, en Andratx. Cuatro coches les fueron intervenidos.
Los investigadores de la UCRIF también detectaron que las prostitutas del burdel eran sometidas a explotación sexual. En el prostíbulo de la calle Benito Pons i Fábregas de Palma se encontraban habitualmente 23 mujeres. Las meretrices aseguraron que los propietarios les adeudaban a cada una de ellas una media de 8.000 euros por ofrecer sus servicios.
Además, cuando alguna de las jóvenes se negaba en rotundo a mantener relaciones sexuales con algún cliente del prostíbulo, eran sometidas a amenazas e intimidación para que cambiaran de opinión de inmediato. El portero del establecimiento se encargaba supuestamente de amedrentar a las víctimas.
Por este motivo, los agentes de la Brigada de Extranjería les detuvieron a los responsables del Globo Rojo por cometer en el local supuestos delitos relativos a la prostitución y contra los derechos de los trabajadores.
El Bentley descapotable de Luigi Carlo en el Paseo de Mallorca. l.Marina
Pese a toda esta acumulación de impagos, el propietario del conocido club de alterne palmesano vivía aparentemente ajeno a todas estas circunstancias. De hecho, Luigi Carlo de M. era también el dueño de una inmobiliaria con sede en la avenida Gabriel Roca del Paseo Marítimo de Palma. El hombre quedó en libertad ayer por la tarde tras declarar en el juzgado de guardia.
Hace unas semanas, los agentes de la UCRIF detuvieron al gerente del prostíbulo e ingresó en prisión.
Tenía pendiente una reclamación judicial emitida por las autoridades alemanas por un presunto delito de tráfico de drogas. Los hermanos Khalil y Abdul Youssafi, de los Ángeles del Infierno, mantuvieron estrechos contactos con el dueño del Globo Rojo para adquirirlo, aunque las negociaciones no prosperaron. Las tarjetas de ambos fueron halladas en el chalé de Camp de Mar.
