Policía desde hace 30 años y licenciado en Derecho, el inspector jefe José Antonio Navarro, de 52 años, lleva desde el verano pasado al frente de la Policía Local de Calvià, cuerpo que ya dirigió entre 1997 y 2001. Conoce bien las características de un municipio con núcleos muy distintos que cada año acoge a millones de turistas y aclara: "La situación en Magaluf ha mejorado mucho, hace unos años era peor".

€Tres turistas han muerto en quince días al caer al vacío desde balcones, y eso que todavía no ha empezado la temporada alta. Pinta mal la cosa, ¿no?

€Desde luego es una mala noticia que haya turistas que fallezcan en nuestro municipio. Aunque si pensamos en la cantidad de gente que pasa por aquí, millones al cabo del año, es casi inevitable que ocurra algún incidente. De todas formas, hay que aclarar bien lo que ha sucedido. Hoy en día, con la repercusión en las redes sociales, parece que todo se debe al "balconing", que es como llaman algunos turistas a saltar desde los balcones de sus habitaciones a la piscina. Ninguno de estos tres casos que ha habido en Calvià ha sido propiamente un "balconing". El primero fue el de un señor que se cayó accidentalmente por el hueco de una escalera cuando subía a su apartamento. En el segundo caso la víctima se asomó al balcón, perdió el equilibrio y cayó. Y el tercero fue una muerte voluntaria. Ninguno fue un "balconing". Aunque estamos muy preocupados porque cualquier accidente que ocurre en Magaluf y más relacionado con caídas accidentales enseguida se etiqueta como "balconing" y tiene mucha repercusión.

­€En cualquier caso, parece que la mayoría de estos accidentes están relacionados con un consumo abusivo de alcohol. ¿Qué se puede hacer para tratar de evitarlo?

€Eso es una evidencia. En la mayor parte de los casos son accidentes provocados por el alcohol, y nos preocupa mucho. ¿Qué se puede hacer? Hace poco hemos tenido una reunión de la junta local de seguridad y estamos en contacto con el delegado del Gobierno. Nos dijo que la Guardia Civil nos iba a ayudar a controlar la venta de alcohol, que al menos se haga dentro de la legalidad, en los horarios que corresponden. Respecto a la droga, por supuesto, estamos trabajando mucho con la Guardia Civil para controlar el consumo de droga en las zonas turísticas. Y también se van a tomar medidas por parte de la asociación de hoteleros.

€También se contempló la posibilidad de obligar a los hoteles de elevar las barandillas de los hoteles o de colocar algún impedimento para evitar estas caídas.

€Sí. El delegado del Gobierno nos informó de que estaba en contacto con las asociaciones de hoteleros para mejorar la seguridad en los balcones, que estén más separados para evitar que pasen de un balcón a otro, o elevar las barandillas. También se está mirando que los hoteles cuenten con personal de seguridad suficiente para controlar estos incidentes.

€Otro de los caballos de batalla que tienen en el municipio son las peleas, en muchos casos también relacionadas con el consumo de alcohol. Hace poco hubo un joven que hirió a otros tres con una botella rota. ¿Hay forma de atajar esto?

€Aquí hay varios frentes de actuación. Desde el punto de vista legal nosotros podemos controlar el consumo: que no se beba en la calle, controlar el horario de los locales, que no sirvan alcohol a menores o a personas que ya están embriagadas . Y también, en colaboración con la conselleria de Sanitat, se hacen controles de la calidad del alcohol que se vende. Luego, a nivel municipal, también hemos hablado con el alcalde para buscar diferentes soluciones, como hablar con las asociaciones de comerciantes, de bares y de discotecas, para tratar de regular ofertas como las "happy hour". Pero el alcohol es legal y es muy difícil de controlar.

€Además parece muy relacionado con una oferta turística concreta, muy relacionada con la fiesta nocturna.

€El caso de Magaluf en verano llama mucho la atención, con toda la oferta complementaria, sobre todo dirigida a gente joven. Yo llevo mucho tiempo en esta zona y creo que antes, hace años, era mucho peor que ahora. Posiblemente no llamaba tanto la atención, no existían las redes sociales, pero la situación en Magaluf, y en concreto Punta Ballena, ha mejorado mucho. Antes había "hooligans" de los de verdad, treintañeros, gente muy dura. Ahora sobre todo son chicos jóvenes, de 18 y 20 años, que vienen de viajes de estudios, despedidas de soltero o viajes de fin de semana. Desde el punto de vista policial no generan muchos problemas. Puede que se embriaguen, que no encuentren su hotel o se metan en algún lío, pero no nos generan los conflictos violentos que había hace unos años.

€Quiere decir que las cosas están mejorando, al menos en cuanto a reyertas o enfrentamientos con los policías.

€Enfrentamientos con los policías apenas existen. Hay mucha gente y se pueden dar momentos de tensión, pero no es ni mucho menos como en los años ochenta y primeros de los noventa.

€Otra de las batallas que tienen en el municipio es la de la prostitución callejera. ¿Cómo ha funcionado la estrategia de denunciar a las prostitutas por desobediencia?

€Hemos mantenido esta estrategia penal durante varios años. Tras reiteradas denuncias por ejercer una actividad prohibida, cuando se volvía a identificar a una prostituta ejerciendo en la calle, la denunciábamos por desobediencia. Pero el año pasado ya no la llevamos a la práctica porque a nivel judicial no funciona. Los jueces, desde su criterio, consideran que es una infracción administrativa y que, a pesar de haber una reiteración, se tiene que solucionar desde el punto de vista administrativo y no hay que judicializarlo. A partir de ahí, obviamente, la cosa se nos ha complicado porque tenemos menos herramientas legales para intentar solucionar esta problemática.

€¿Y cómo abordan ahora el problema?

­€La única solución que nos queda es ejercer mucho control, mucha presión sobre esta actividad. Estar en la calle, estar pendientes de ellas, ver cómo se mueven, ver adónde van, identificarlas... Si están correctas tienen su libertad de deambulación, no podemos ni mucho menos coartarla. Pero tenemos que comprobar que las que están cumplen la normativa para estar en España. Y si no están legales, se entregan a través de la Guardia Civil al Cuerpo Nacional de Policía, que son los competentes en temas de extranjería, para que instruyan el correspondiente expediente de expulsión. En definitiva, el único recurso que tenemos ahora es identificarlas. Las podemos seguir denunciando, pero sabemos que esas multas no van a ningún sitio porque no las van a pagar. Son insolventes, no tienen domicilio conocido y es muy difícil ejecutar estas denuncias. Solo nos queda ejercer mucha presión para intentar entorpecer su actividad. Todo para intentar que no cometan delitos, que es de donde vienen realmente los problemas con esta gente.

€Porque muchas de estas mujeres también cometen robos. Si no les va bien la noche, no dudan en atacar a turistas ebrios para desvalijarles.

€Eso es lo que más nos preocupa, y frente a estos casos actuamos con contundencia. Las detenemos y las ponemos a disposición judicial.

€¿Tienen idea de cuántas prostitutas se instalan en el municipio cada verano?

€Hace poco hicimos un control junto a la Guardia Civil y la Policía Nacional. Estamos a principio de temporada y es ahora cuando tenemos que empezar a actuar, para que vean que vamos en serio. Y durante todo el verano vamos a mantener estos controles. Se identificaron 23 meretrices, de las cuales cuatro quedaron detenidas por extranjería por la Policía Nacional, y tres fueron detenidas por robos. Por tanto, de estas 23 ya sabemos que siete tienen temas pendientes. Luego también hacemos controles diarios y tenemos controladas del orden de quince a veinte mujeres. Aunque sabemos que conforme avance el verano intentarán entrar más. En el momento en que dejamos de ejercer presión, el número se dispara. Funcionan en red, tienen sus teléfonos y se llaman entre ellas. Sabemos cómo funcionan. Si ejercemos presión a principio de la noche, vienen pocas. Si no lo hacemos, entran muchas más.

€Así que la redada que hicieron sería también una especie de aviso.

€Sí, así es.Hacer un operativo de estos a principio de temporada es bueno, porque ven que vamos a estar pendientes de este tema. Y este año vamos a hacer bastantes controles más que el año pasado.

€Hemos hablado de alcohol y sexo, nos faltan las drogas. ¿Han detectado la presencia de traficantes en el municipio?

€Bueno, esa es una competencia de la Guardia Civil. Nosotros, lógicamente, colaboramos con ellos y siempre que detectamos algún tipo de tráfico de estupefacientes, intervenimos. Nos hemos reunido con ellos para distribuir un poco el trabajo para intentar cubrir entre los dos cuerpos el máximo que podamos. Uno de los objetivos que ellos se han marcado es estar muy pendientes del tráfico a pequeña escala, el menudeo, sobre todo en la zona de ocio, en Magaluf, en la zona de la playa... Nosotros, aunque no es una competencia propiamente nuestra, el año pasado hicimos 29 detenciones por delitos contra la salud pública. En su mayor parte eran vendedores ambulantes de origen subsahariano.

€Este es otro fenómeno que se ha detectado, que estas personas, ademas de vender imitaciones, también trafican.

€Sí. No en todos los casos, los hay que se limitan a la venta ambulante, pero los hay que utilizan esto como tapadera para ofrecer pastillas o hachís.

€Lo que está claro es que alrededor de la gran cantidad de turistas que vienen aquí cada verano, vienen también una gran cantidad de delincuentes que viven de ellos. ¿Cuáles serían los principales peligros que acechan a un turista que viene de vacaciones?

€Yo diría que son los propios de cualquier turista en cualquier lugar, como nosotros cuando salimos fuera. Hay que tener cuidado sobre todo con los descuideros y cuando llegas al hotel no perder de vista tu maleta. Luego, estar pendiente para que no te hurten en la playa. Y a última hora de la noche, y sobre todo si has bebido, intentar que no te roben. Hay que procurar llevar poco dinero encima. En fin, son las medidas de precaución básicas que debe tomar toda la gente que viaja. Y sobre todo, los que se quedan a dormir en la playa son víctimas fáciles para los descuideros. Nosotros tenemos vigilancia en la playa para combatir los hurtos, pero hay que evitar esas situaciones.

€Una de las características que tiene la Policía Local de Calvià es la estacionalidad. No tiene nada que ver el trabajo que tienen en invierno con el de verano. ¿Tienen planes específicos de refuerzo ante el verano?

€Claro, lógicamente. Ya son muchos años con esta experiencia. Tenemos una dinámica de actuación que viene de años atrás y que intentamos mejorar año tras año. Sabemos que el trabajo fuerte lo tenemos sobre todo en julio y agosto. Junio y septiembre también, pero últimamente la estacionalidad se nota cada vez más. La plantilla es la que es y especialmente en estos tiempos no se puede ampliar. Somos unos 160. Esto, para una población de 55.000 habitantes, puede parecer mucho, pero nos encontramos con un municipio que geográficamente es muy disperso, con diferentes núcleos que van desde Palma hasta Andratx...

€Y con características muy diferentes entre sí.

€Efectivamente, no podemos dar el mismo servicio a los habitantes de Calvià Vila que a los de Peguera o Magaluf, porque nos piden cosas totalmente diferentes. Los vecinos de Calvià quieren estar tranquilos, que por la noche no haya ruidos, que los dueños de perros respeten las ordenanzas... En fin, una convivencia tranquila. En cambio, en Magaluf los empresarios nos reclaman seguridad para sus negocios, sobre todo por las noches, o que actuemos contra la prostitución... Son problemáticas totalmente diferentes y es complicado dar a todos lo que nos requieren.

€Ustedes fueron pioneros con la puesta en marcha de una unidad canina. ¿Cómo ha funcionado?

€Hemos hecho un cambio de la estructura organizativa, un poco obligados por las características especiales del municipio, que te obligan a mantener un margen de maniobra para poder mover personas de distintos grupos en función de las necesidades. Hasta ahora teníamos unidades que tenían una cierta rigidez, que no nos permitían hacer cambios ágiles para adaptarnos. Ahora hemos hecho unidades más polivalentes. Son agentes que tienen que saber hacer de todo. Dentro de esa polivalencia también hay grupos más especializados como el de adiestramiento canino. Tenemos tres perros, dos de seguridad y uno de detección de drogas, y hay un oficial y cinco policías que trabajan con ellos. Sobre todo cuando hacemos controles de seguridad, el perro de detección de drogas hace muy buen trabajo, es muy efectivo. Y los perros de seguridad también, sobre todo en aglomeraciones de gente. Aunque nunca muerden porque llevan una protección, tienen un gran efecto disuasorio.

€También están utilizando el test de detección de drogas en los controles de alcoholemia.

€El tráfico es una de nuestras principales competencias. Desde el año pasado incorporamos el drogotest, que nos permite dar un paso más en los controles de alcoholemia. Cuando un conductor da negativo pero nos inspira sospechas de que puede haber consumido drogas entra en juego el drogotest. La cuestión del tráfico es muy importante para nosotros. La conducción bajo los efectos del alcohol o las drogas tiene unas consecuencias gravísimas en muertos y heridos.