El conseller de Agricultura, Medio Ambiente y Territorio, Biel Company, ha asegurado hoy que las investigaciones apuntan a que ninguno de los dos incendios que empezaron en Mallorca el miércoles, casi de forma simultánea, fueron provocados, y ambos se podrían haber originado por chispas fortuitas.
"Uno de los casos es totalmente una desgracia", ha afirmado el conseller sobre el fuego agrícola ocurrido en el Pla de Mallorca (en Santa Margalida, Maria de la Salut y Llubí), que ha detallado que comenzó por una chispa en una máquina con la que estaban trabajando en la zona, según ha explicado en la rueda de prensa posterior a la reunión del Consell de Govern.
En cuanto al que ha afectado a los municipios de Sant Llorenç des Cardassar y Artà, ha asegurado que "no está confirmado" pero el origen podría ser "una chispa de un coche". La Guardia Civil ha descartado que fuera provocado por un pirómano, aunque sigue investigando las causas, ha añadido.
El conseller ha lamentado que este año Baleares esté superando todas las medias de superficie forestal quemada de los últimos años y ha destacado que si el promedio de la última década era de 71,84 hectáreas anuales, entre enero y junio de 2011 han ardido 1.713 hectáreas, sin contar los dos incendios de esta semana.
"Es una bestialidad, es un incremento tremendo", ha alertado Company, que ha señalado que aunque la mayor diferencia se debe a un único incendio, el ocurrido en la sierra de Morna de Ibiza donde se quemaron 1.576 hectáreas, solo los dos últimos ocurridos esta semana en Mallorca ya multiplican la media del decenio.
Company ha precisado que el incendio de Artà ha quemado 373 hectáreas en una primera estimación, y del Pla ha afectado a otras 300.
