El titular del Juzgado Central de Instucción número uno de la Audiencia Nacional, el juez Santiago Pedraz, dejó ayer en libertad a Giovanni di Stefano, más conocido como ´el abogado del diablo´. No obstante, el magistrado estableció la obligación a Di Stefano de presentarse los días 1 y 15 de cada mes en un juzgado y ordenó la retirada de su pasaporte, pese a considerar que no piensa eludir la acción de la Justicia..

A primera hora de la mañana de ayer, Giovanni di Stefano, que defendió a Sadam Hussein y al expresidente de Serbia Slobodan Milosevic, abandonó la habitación del hospital Son Espases, donde estaba ingresado, con destino a Madrid. En concreto, sobre las 6.40 horas cogió un vuelo hacia la capital.

El abogado italiano, asistido por el letrado Jaime Campaner, alegó durante su comparecencia haber tenido un "comportamiento procesal intachable". Asimismo, Di Stefano se mostró predispuesto a presentarse ante la Justicia del Reino Unido en un plazo de 10 días. Pese a que Di Stefano reiteró que se considera víctima de un "montaje" y calificó de "farsa" el proceso iniciado contra él, no se opuso a desplazarse al Reino Unido para enfrentarse a la Justicia. A lo que sí se negó el abogado italiano durante su comparecencia ante el juez Pedraz fue a ser examinado por un médico forense.

El abogado de Di Stefano argumentó motivos de "arraigo" para evitar que el juez dictara su ingreso en prisión. Giovanni di Stefano tiene fijada su residencia en Mallorca, donde vive hace más de un año, y también vive en Madrid.

Giovanni di Stefano fue detenido en Son Vida, donde reside, sobre las nueve de la noche del pasado lunes en virtud de una orden europea de detención emitida por las autoridades del Reino Unido.

Su delicado estado de salud hizo que fuera trasladado urgentemente a Son Espases. Ingresó en la Unidad de Detenidos del centro sanitario y fue intervenido quirúrgicamente de urgencia. Allí permaneció custodiado hasta la noche del martes. Debido a sus problemas de salud, fue puesto en libertad la noche del martes.

Giovanni di Stefano fue detenido de nuevo el pasado jueves. Un auto decretaba entonces su puesta a disposición del Juzgado Central de Instrucción número uno de la Audiencia Nacional.

A Giovanni di Stefano se le acusa de los presuntos delitos de estafa, blanqueo de capitales, fraude y robo. Los hechos por los que el controvertido abogado italiano era reclamado por las autoridades británicas se remontan al periodo comprendido entre los años 2004 y 2009. Al parecer, este letrado se presentó como defensor sin contar con la preceptiva acreditación para ejercer como abogado en Gran Bretaña.

De acuerdo con la acusación, la esposa de un condenado a cadena perpetua contrató sus servicios y le abonó la suma de 120.000 libras. Pese a cobrar esta cantidad, nunca hizo ninguna alegación.

Asimismo, en 2004 adquirió un coche a plazos que nunca llegó a pagar. Sacó el vehículo del Reino Unido un año más tarde. En otras tres ocasiones cobró sumas por unos recursos que nunca puso.