Cae el sol en Cala Galiota. Mientras, vecinos de la Colònia de Sant Jordi y diversas personalidades de la isla reclaman la libertad de Nahjiba o Nadjiba Mohamed Belkacem, retenida desde diciembre de 2013 en los campamentos de refugiados del pueblo saharaui en Tinduf. La concentración del pasado lunes comenzó a las 20.30 horas y fue conducida por la periodista Marisol Ramírez, muy implicada en el caso de Nadjiba.
Dentro del programa Vacaciones en Paz, Nadjiba llegó a España en el año 2000 para vivir con una familia de acogida. Contaba con ocho años. Su estancia, con el consentimiento de la familia biológica, se alargó trece años más por unos problemas de salud que requerían un largo tratamiento: un pie equino y flexo en una rodilla. Es en diciembre de 2013 cuando decidió regresar a los campamentos durante unos días con la intención de recoger la documentación necesaria para tramitar la nacionalidad española, pero Nadjiba no consiguió volver con su familia de acogida. A día de hoy, se encuentra en un campamento del Frente Polisario, en Smara-Tarsi, Argelia.
La familia biológica ha decidido no dejar que regrese porque "pertenece a la tribu y tiene que casarse", según Marisol Ramírez. "Nos dicen que no entendemos su cultura. Es el mismo pueblo saharaui que reclama libertad el que ahora no deja que Nahjiba vuelva a España", afirmaba la periodista. La voz de Nahjiba se pudo escuchar en la concentración gracias a la grabación de una llamada que realizó la muchacha a la casa de acogida de su hermano, en Mallorca. "Os suplico que sigáis apoyándome", decía la voz de la joven, que denunció estar constantemente bajo vigilancia para evitar que se escape. En el manifiesto leído por Marisol Ramírez en la concentración, se afirma que "cualquier plan que permita su desarrollo intelectual se ha visto truncado de forma virulenta", ya que la joven se encontraba realizando unos estudios de Formación Profesional en Sevilla cuando regresó a los campamentos. "Está vigilada 24 horas al día con posibles amenazas de atentar contra su integridad si intenta escapar", reza el documento.
Durante el acto en Cala Galiota también se contactó por teléfono a José María Contreras, padre de acogida de Nadjiba, en Huelva. "Nuestra familia y yo estamos muy mal", aseguró Contreras. Ramírez agradeció a numerosos artistas, como Tomeu Estelrich, Jaume Tugores, Bárbara Juan Pastor, Joan Sastre Quetglas y al modelo francés Clément Chabernaud, entre otros, el apoyo prestado a la causa de Nadjiba. Al acto también asistió el alcalde de Ses Salines, Bernat Roig. Miquel Ensenyat también anunció su compromiso con el caso, así como varias personas en Facebook y Twitter con fotos que piden su libertad bajo el lema Free Nahjiba. "El Govern aún no se ha pronunciado", dijo Ramírez, quien puntualizó que Francina Armengol tiene dos niños del Sáhara en acogida.
En el encuentro se exhibió una pancarta de seis metros con el lema "Nahjiba libre" en la que cualquier persona pudo dejar su mensaje o dibujo. Asimismo, un micrófono abierto restaba a la espera de reivindicaciones, opiniones o discursos por parte de quien quisiera subir a expresarse. Nadjiba no es la única joven retenida en contra de su voluntad: el caso, entre otros, de Koria Badbad Hafed, también de 23 años, pugna por resolverse desde 2010.
La concentración finalizó a las 21.40 horas con un sonoro aplauso. A tan solo unos kilómetros de las costas argelinas, Cala Galiota se dormía el lunes con el recuerdo de Nahjiba, a la que los asistentes mencionarán "cuantas veces sea necesario", según Ramírez, a fin de conseguir su liberación.
