Las fiestas de Maria han contado por vez primera con un nutrido grupo de cabezudos que celebraron su primer baile el mismo día de la Mare de Déu de la Salut.
Se trata de niños de edades comprendidas entre los 4 y 11 años que se pusieron en círculo en la plaza des Pou para ofrecer a todos los vecinos su primera actuación con los disfraces fabricados por ellos mismos desde principios de año. Todos ellos han contado con la ayuda de Catalina Arrondo para llevar a cabo este complejo, y al mismo tiempo ilusionante, trabajo. "En las pasadas fiestas de Sant Antoni ya presentamos las primeras colles de caparrots; en Navidad habíamos confeccionado 14 y después, por Pascua, 16 más con lo que ya tenemos la treintena. Ahora, en estas fiestas, hemos decidido salir y realizar el primer baile", explica Catalina Arrondo.
Pequeño taller
Catalina vivía en Calvià antes de establecer su residencia en Maria y allí había mucha tradición de caparrots, gigantes, demonios, etc.. "pensé que podría ser interesante montar un pequeño taller aquí, con el apoyo del ayuntamiento que corría con los gastos de la pintura, metal, papel..; prefiero hacerlo así que no formar una asociación. A medio o largo plazo tenemos la intención de confeccionar cabezudos a base de fibra de vidrio, que serían más resistentes y ligeros que los que hacemos ahora con papel y cartón. Y más adelante intentaremos fabricar dos gigantes", sostiene la monitora.
