Hoy por la mañana, las autoridades locales, encabezadas por el alcalde conservador, Pedro Rosselló, visitarán la nueva sede de la empresa municipal SAM, que gestiona la red de agua y los aparcamientos. Resulta que la nueva sede es nada más y nada menos que el céntrico y polémico edificio de Can Bauçà, comprado en tiempos del gobierno Pastor y que costó alrededor de un millón de euros. Cabe apuntar que han sido necesarias diversas obras de adecuación, consolidación, mejora, adaptación... Así pues, la SAM estrenará oficialmente las nuevas oficinas municipales ubicadas en plenas calles Major y Convent, siendo el primer servicio municipal que ocupe Can Bauçà. Ahora en la capital del Llevant tan sólo falta que el agua sea potable, se construya el demandado segundo centro de salud, la ciudad deje de ser 'Manaclot', la piscina pública sea realmente un revulsivo para la salud y el deporte (con precios asequibles y oferta atractiva), se dinamice el sector de la madera y el mueble, se resuelvan los problemas de las millonarias expropiaciones de zonas verdes, etc. Casi nada...
El consistorio y Cala Varques
Si el lunes el Govern emitió una nota para informar de la operación antiacampadas, vivacs, ocupación de cuevas y venta ambulante ilegal en la famosa cala, ayer fue el consistorio la institución que expresó su opinión. A destacar que el Ayuntamiento anuncia que "las inspecciones para acabar con los excesos se inician y continuarán durante este verano". A su vez, remarca cuáles son las competencias de la Conselleria, Costas y Seprona. La implantación de buses lanzadera parece que tardará un tiempo, si es que llega a hacerse efectiva...
