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Mercado inmobiliario

El ladrillo de cinco estrellas resurge en Calvià

Cerca de Port Adriano, se construyen villas de 9,2 millones, y en Santa Ponça se ofrece vivir en un "auténtico 'pueblo' mallorquín"

Recreación de la terraza de una de las villas que se están construyendo en Cap Adriano.

¿Crisis? ¿Quién dijo crisis? El ladrillo de lujo revive con fuerza en el municipio de Calvià. Dos nuevos proyectos evidencian el resurgimiento de este sector inmobiliario, impulsado por la robustez de la demanda internacional. Las urbanizaciones se ubicarán cerca de El Toro, con el nombre de Cap Adriano, y en Santa Ponça (Pueblo).

Lo confirmó ayer Engel&Völkers, una inmobiliaria alemana especializada en la intermediación de inmuebles de lujo. La compañía anunció sus proyectos premium en la isla, entre los cuales figuran estas dos zonas residenciales en Calvià y Cap Vermell Estate, en Canyamel (Capdepera). En este último caso, las villas ya están acabadas y pueden comprarse por entre 3,5 y 5,5 millones de euros.

"Cada vez son más los compradores internacionales que ven en estas propiedades una inversión segura", destacó el presidente de Engel&Völkers, Christian Völkers, en declaraciones recogidas de una nota de prensa.

En lo que respecta a Cap Adriano, el proyecto se encuentra en fase de construcción con la previsión de que esté listo a finales de 2017, según confirmaron desde el departamento de Comunicación de la compañía. El complejo se ubica cerca de Port Adriano y "será uno de los últimos con acceso directo al mar que se construyan en Mallorca debido a su estricta regulación urbanística", subraya la inmobiliaria.

Una simulación de cómo quedará ´Pueblo´, en Santa Ponça.

Se edifican nueve villas de entre 800 y 1.500 metros cuadrados, que se pueden comprar desde 9,2 millones de euros, además de 10 apartamentos (entre 150 y 300 metros cuadrados) desde 2,2 millones. En el caso del complejo previsto en Santa Ponça, se halla en fase de planificación, con la idea de que pueda estar acabado en 2018.

Engel&Völkers lo promociona transmitiendo el mensaje de que ofrecerá la posibilidad de "vivir en un auténtico 'pueblo' mallorquín, en el que se ha cuidado hasta el último detalle, incluida una Plaza Mayor". En torno a esta plaza, habrá un conjunto de 13 viviendas, con precios que oscilarán entre 1,7 y 2,7 millones.

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