El Ayuntamiento de Escorca está diseñando un nuevo sistema de recogida de basura en el municipio. Este servicio implicará un ambicioso proyecto para obtener un ahorro considerable en dinero y también beneficios medioambientales.
El plan implica que el Ayuntamiento asuma al completo la recogida de basura y el reciclaje.
Antoni Solivellas, alcalde de Escorca, explica que "en la actualidad la recogida de basuras la lleva el propio Ayuntamiento. Sería mucho más caro si se sacara en concesión dada la especial configuración del municipio. Resultaría que al coste habitual tendríamos que añadirle el beneficio de la empresa y dados los elevados costes de transporte y la gran dispersión del municipio supondría una cantidad aún mucho mayor de la que actualmente pagamos".
El 25% del total del presupuesto municipal se invierte en la recogida de basuras. Solivellas especifica que "estamos hablando de una cifra que ronda los 200.000 euros anuales".
Basura orgánica
Una gran parte de la basura que se recoge en Escorca es orgánica. En la actualidad no se lleva a cabo una recogida específica, por lo que se trasladada a Son Reus para incinerar. El municipio piensa establecer un sistema de recogida de basura orgánica separada de la de incineración.
Esto supone idear un sistema para transformar esta basura orgánica, pues tampoco le salen las cuentas al consistorio si ha de trasladarla a una planta de compostaje. La idea es abrir una pequeña instalación para generar compost en Lluc. Aún falta el solar. Solivellas explica que "es preciso contemplar que estamos en una zona altamente protegida por lo que será necesario llevar a cabo un proyecto que pueda ser aceptado. No creemos que sea un problema puesto que la idea es que la basura se transforme en abono que pueda luego ser comercializado o cedido a los payeses, o ambas cosas".
El consistorio negocia con el santuario un posible emplazamiento para la pequeña planta de compost. Solivellas sostiene que "además de aportar un beneficio medioambiental podría ser didáctica".
Los restaurantes
En Escorca hay varios importantes puntos generadores de residuos. Los restaurantes de Lluc y sa Calobra son los principales. Solivellas incide, como dato anecdótico, "en la gran cantidad de peladuras de naranja que se generan. Parece cosa de risa pero aquí se exprime una increíble cantidad de zumos".
Otro punto generador de una elevada cantidad de basura son las áreas recreativas gestionadas por Ibanat. Solivellas incide en que "el control en estos lugares será más difícil porque dependerá de la voluntad de los miles de usuarios que pasan por allí a diario".
