La construcción de un nuevo colegio es una necesidad vital en Búger debido a los problemas estructurales que presenta el actual centro educativo, el CEIP Es Molins. Construido hace 65 años sobre los pozos del pueblo, el centro arrastra "serios problemas" desde hace dos legislaturas, según explica la alcaldesa Siquier. "Se han hecho pequeñas reparaciones, pero no es posible arreglar todo el edificio", lamenta la regidora.

Un informe del arquitecto municipal detalla toda una serie de graves desperfectos del centro como la peligrosidad que presentan los escalones, la proliferación de humedad o la imposibilidad de usar algunos de los servicios. Actualmente, el colegio tiene 64 alumnos.