El pleno ordinario celebrado ayer en el ayuntamiento de Pollença acordó el cumplimiento de una reciente sentencia de la sala de lo contencioso-administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Balears (TSJB) que ratifica el justiprecio de 2,3 millones de euros estipulado por el jurado provincial de expropiación con respecto a Can Bach, una finca que el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Pollença preveía expropiar en 1990 para ampliar el cupo de zonas verdes que debe disponer el municipio.
La sentencia del TSJB desestima el recurso interpuesto por el Ayuntamiento 'pollencí' contra la citada resolución emitida por el jurado provincial de expropiación en el año 2011, que a su vez estimó el recurso de reposición formulado por los propietarios de la finca de Can Bach, disconformes con la cantidad fijada en la primera resolución para valorar el solar, 1,2 millones de euros.
El ayuntamiento de Pollença ya abonó en su día un total de 1,1 millones de euros del precio de expropiación con el objetivo de evitar el pago de intereses sobre esta cantidad. La institución local pagó 642.097 euros en julio del año 2013 y 487.277 euros en marzo del presente año 2015.
La cantidad pendiente de satisfacer a los propietarios del solar de Can Bach asciende a 1,23 millones de euros, una cifra que el Ayuntamiento no ha podido presupuestar en las cuentas de 2015 debido a la falta de crédito. Tampoco puede aprobar una modificación presupuestaria para dar cumplimiento a la Ley orgánica de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad Financiera.
En este sentido, el interventor municipal emitió un informe el pasado día 9 de noviembre en el que formula nota de objeción de legalidad por falta de crédito suficiente para pagar la cantidad que falta por la expropiación del solar.
Pago en dos plazos
Por este motivo, el pleno de ayer acordó la resolución de la discrepancia formulada por el informe de Intervención y ordenó a la tesorería municipal el pago de la cantidad restante para cumplir la sentencia judicial. Así, la corporación autorizó la habilitación de una partida de 616.206 euros en los presupuestos de 2017 y otra cantidad de 616.206 euros en las cuentas de 2018 para satisfacer las cantidades adeudadas.
El teniente de alcalde de Urbanismo, Tomeu Cifre Bennàssar (Junts Avançam), explicó ayer que la finca de Can Bach está ubicada en el centro de una isleta de casas, a poca distancia del centro cultural de la localidad del Nord. Cifre reconoció que la cantidad que el Ayuntamiento debe pagar por la expropiación "es muy importante" y que por ello la institución deberá hacer un esfuerzo económico. Por ahora, el Consistorio no tiene ningún proyecto para otorgar un uso específico a la finca expropiada. "Deberemos pensarlo", indicó el regidor. Asimismo, el equipo de gobierno ha tomado la decisión de no recurrir el fallo ante el Tribunal Supremo.
