Los ciudadanos pagarán por servicios que antes eran gratuitos
Muchos ayuntamientos explotarán servicios hasta la fecha gratuitos para reducir el déficit. Consell cobrará por prestar mobiliario urbano, mientras que Felanitx hará lo propio por el alquiler de espacios municipales (el parque de sa Torre costará 3.000 euros). Sa Pobla hizo pagar este año un euro por usar el autocar con destino al pancaritat de Crestatx y Santa Margalida ha fijado precio por los informes policiales que demandan las aseguradoras cuando se produce una colisión de tráfico. En Lloseta, el uso del tanatorio se grava con cien euros. Un caso curioso es el de Porreres, donde el Ayuntamiento ha suprimido el derecho que hasta la fecha tenían los hijos de los funcionarios a un seguro privado y medicinas.
El mantenimiento de los espacios públicos se verá mermado
Los ciudadanos también notarán la crisis y los recortes municipales en las calles y plazas de sus localidades. Algunos ayuntamientos han optado por reducir drásticamente los fondos que destinaban al mantenimiento con el fin de ahorrar en el pago de horas extra a la brigada. El alcalde de Costitx, Antoni Salas, admite que el recorte en mantenimiento "se notará en los caminos rurales y en la pavimentación de vías urbanas". En cualquier caso, los ayuntamientos han emprendido importantes reestructuraciones para que sea el propio personal municipal el encargado de realizar el mantenimiento y no tenga que contratarse a una empresa externa, un lujo que pocos pueden permitirse en los tiempos que corren.
