El proyecto de adecuación de la fachada marítima, impulsado por el exministro de Medio Ambiente, Jaume Matas, e inaugurado en febrero de 2004, presenta múltiples deficiencias. Una elevada cantidad de luces del paseo litoral están rotas o no funcionan, principalmente en el tramo de la zona hotelera, entre los hoteles Sur Mallorca y Marqués del Palmer. Se calcula que apenas un 10% de las luces prestan bien su función.

Asimismo, vecinos se quejan de la "falta de mantenimiento" de zonas ajardinadas, advirtiendo por ejemplo de tamarells muertos en Cala Galiota. Otra controversia es protagonizada por la circulación de bicicletas en el paseo en cuestión, pues originalmente fue concebido de uso peatonal exclusivo y de cada vez más hay riesgos de accidentes.

Cabe apuntar que tanto el nuevo alumbrado como el ajardinamiento se incluyeron en un Plan E a ejecutar en 2010 con un coste de alrededor de 100.000 euros.

Por otra parte, la ORA y la falta de un mayor orden de los estacionamientos en puntos como Cala Galiota, preocupan seriamente.