Las cofradías de Semana Santa deben acreditar ante el Obispado que no tienen entre sus miembros delincuentes sexuales, tal como establece una reciente normativa para aplicar la Ley de Protección a la Infancia. Las hermandades han tenido que enviar un listado con el nombre y el DNI de todos los cofrades que están en contacto y "tratan habitualmente" con los miembros menores de edad "en el ejercicio de sus funciones en la cofradía", como se puede leer en la misiva enviada por la Diócesis de Mallorca.

Este certificado, que debe ser "expedido y firmado por el secretario correspondiente y con la aprobación del presidente", tiene que ser complementado con los "certificados del Registro Central de Delincuentes Sexuales -del ministerio de Justicia- de cada una de las personas nombradas en el anterior documento", según añade la misiva, que fue enviada por el Obispado a las 30 cofradías palmesanas, así como a las del resto de la isla. Deben entregarlo antes del 31 de mayo y, con ello, demuestran que "no han sido condenados por delitos de naturaleza sexual".

El conocido certificado se pide también a profesores al colegio y de comedor, así como a todo aquel que tiene que estar en contacto habitual con menores, según el desarrollo de la ley.

La carta, firmada por el secretariado diocesano de cofradías, especifica que la petición "afecta especialmente a las cofradías que tienen escolanía, sección infantil de una banda, etc., pero también a aquellas con cofrades menores de edad". Los certificados pueden ser presentados ante el rector de sus respectivas parroquias, a la asociación de cofradías o directamente al Obispado.