En los ayuntamientos de los principales municipios de la part forana también se realiza una supervisión previa de las obras, según explican los responsables de Cultura de Calvià, Andratx, Manacor e Inca, aunque nadie asegura que, pese al control, no se pueda producir un episodio similar al de Madrid.
En la localidad calvianera, por ejemplo, todas las actuaciones que el consistorio contrata "son supervisadas previamente", tal como indica la concejala que se encarga del área de Cultura, Nati Francés. Realiza esta tarea la jefa de servicio del departamento. "Ella visualiza las actuaciones a contratar", expone Francés. La responsable municipal agrega que puede existir el peligro de que, cuando se represente la obra, no sea exactamente como se había previsto en un inicio. "Está claro que el riesgo existe, pero el control previo también", remarca. Sin llegar a la magnitud del controvertido espectáculo de los titiriteros de Madrid, tuvieron algún caso en Calvià en el que una actuación infantil "chirrió un poco", señala la responsable política sobre el pasado.
Como sucede en el municipio lindante, la regidora de Cultura de Andratx, Anabel Curtó, afirma que son los técnicos municipales del área quienes se encargan de analizar "previamente" en qué consistirá la representación, ya sea con material audiovisual o gráfico. ¿Se podría producir lo de Madrid? "Cabe la posibilidad de que unos artistas te ofrezcan una sinopsis y luego representen otra. Por lo que, en esta situación, ni la concejala ni los técnicos tienen culpa alguna. El departamento debe fiarse de que la sinopsis presentada es la obra que harán, pero nadie te lo puede asegurar", en palabras de Curtó. En caso de que sea diferente, "puede ocurrir" lo de Madrid.
Propuestas pedagógicas
Tal como destaca la concejala de Cultura del Ayuntamiento de Manacor, Antònia Llodrà, es muy importante que los espectáculos "se adapten al público al que van dirigidos". Por este motivo, "las actuaciones teatrales infantiles y juveniles vienen acompañadas a menudo de una propuesta pedagógica y se recomiendan a una franja de edad determinada. Es evidente que los programadores [del Ayuntamiento de Madrid] no lo tuvieron en cuenta, por lo que ha tenido consecuencias muy graves e indeseables", señala, al tiempo que explica que, en el caso del consistorio manacorí, es la Fundació Teatre de Manacor -con Bartomeu Amengual a la cabeza- la encargada de elegir las propuestas escénicas, lo que comporta un trabajo de control y anterior referencia de las obras, concluye Llodrà.
En el Ayuntamiento de Inca, el responsable político de Cultura, Antoni Rodríguez, confía en el criterio que aplican los técnicos del departamento y, en concreto, de la biblioteca municipal, ya que es el espacio en el que más actos infantiles se llevan a cabo, debido a que "son espectáculos que se renuevan continuamente", tal como explica Rodríguez, quien reconoce que él no se encarga personalmente de supervisar el contenido de las obras antes de su representación, ya que lo hacen los profesionales del área.
