El nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Palma incorporará el solar del Lluís Sitjar a la Cuña Verde como espacio libre público, con la posibilidad, según el teniente de alcalde, Jesús Valls, de que se pueda plantear la construcción en parte de este espacio de edificios para equipamientos, con el fin de asegurar su ejecución.
En cambio, el equipo de Mateo Isern no se plantea como necesidad inmediata el cambio de la situación urbanística actual de es Fortí, pese a que también se encuentra en el cauce de sa Riera y anteriores planes generales lo contemplaban como espacio libre público.
Según Valls, una de las cuestiones que potenciará el nuevo planeamiento será la posibilidad de ejecutar zonas verdes de uso público a cambio de concesiones administrativas para la gestión de equipamientos. Se trata del modelo que ahora se pretende implantar en los 90.000 metros cuadrados de Ca n´Angelí, que podría exportarse en el futuro a la ejecución de otros espacios libres públicos incluidas las fases pendientes del Parc de sa Riera.
Tras la aprobación por la gerencia de Urbanismo del documento de directrices básicas de ordenación, el teniente de alcalde explicó que Cort, dentro del gran objetivo de abrir la ciudad al mar con la incorporación para los usos ciudadanos del Moll Vell, y la conversión en bulevar del paseo Marítimo y del tramo de la autopista del litoral de Llevant, no renuncia a finalizar el Parc de la Mar.
En este sentido, recordó que el proyecto inicial firmado por el equipo integrado por el prestigioso arquitecto Pere Nicolau, incluía una actuación frente al parque actual que incorporaba la construcción de una playa. Si bien esta actuación no se prevé que se ejecute en los próximos ocho años, tiempo de vigencia del nuevo plan, "no vamos a renunciar a ella en un futuro", afirmó el teniente de alcalde.
Sin salir de la potenciación del frente marítimo de la ciudad, Valls indicó asimismo que la nueva normativa urbanística debe incorporar acciones que garanticen o favorezcan la ejecución de los solares de la reurbanización de la fachada marítima del litoral de Llevant, tanto los situados en primera línea como los que se encuentran más cerca de la vía de cintura.
Al respecto, si bien reconoció que en buena medida su ejecución está paralizada por los contenciosos que pesan sobre los solares de Núñez i Navarro, manifestó que en el resto de solares que no tienen ningún problema urbanístico tampoco se han presentado propuestas concretas de desarrollo.
A su juicio, ello puede deberse "al exceso de usos terciarios que hay en la zona", por lo que "estaríamos dispuestos a cambiarlos para posibilitar su ejecución. Como regla general, en estos momentos los solares del polígon de Llevant permiten destinar un 40 por ciento al uso terciario -hotelero, administrativo y comercial, entre otros- y el 60 por ciento restante a residencial.
No se descarta que el nuevo Plan General permita en esta y otras zonas un uso principal, al que debería destinarse un 55 por ciento, dejando el 45 por ciento restante para usos complementarios al principal. El nuevo plan pretende una "ciudad compacta", con un crecimiento que se adapte a lo previsto al Plan Territorial Insular, que permita el máximo aprovechamiento de la edificabilidad vacante para consumir menos territorio y garantice la ejecución de los suelos urbanos sin desarrollar, como el de Son Busquets. Para Valls el sector de la construcción tendrá nuevas oportunidades con el nuevo plan basadas en la rehabilitación de la planta hotelera, la ejecución de los suelos urbanos pendientes y la potenciación de la rehabilitación de las edificaciones existentes.
