La concejala de Urbanismo del ayuntamiento de Palma, Yolanda Garví, confirmó ayer que el equipo de gobierno no es partidario de iniciar de nuevo la tramitación del Plan Especial de Reforma Interior de Cala Major y Sant Agustí, después de que la Comisión Balear de Medio Ambiente informara negativamente sobre su contenido y reclamara la necesidad de acompañarlo de un estudio de impacto ambiental.

La concejala explicó que si se iniciara de nuevo la tramitación de todo el plan, probablemente antes de su aprobación definitiva deberían entrar en vigor los parámetros contemplados en el Plan General para la zona, hecho que en el caso concreto del bosque de Can Tàpera sería más perjudicial, puesto que permite una unidad de ejecución con un gran impacto ambiental. Si bien aún no se sabe cuál será la fórmula utilizada, el objetivo final será preservar al máximo el mantenimiento de la zona boscosa.