"Ya que el venerable Omella ha pedido otro ayudante, hemos pensado en ti, querido hijo, que has ejercido con cualidades humanistas y cristianas e inteligencia el cargo de vicario para la Evangelización". Con estas palabras, cincuenta años después, un mallorquín vuelve a ser ordenado obispo. El sacerdote Antoni Vadell recibió ayer la ordenación episcopal como nuevo prelado auxiliar de Barcelona en una multitudinaria ceremonia en la Sagrada Familia, a la que asistieron hasta 500 feligreses de Mallorca para arropar al hasta ahora vicario y rector.

Tras la lectura del mandato del Papa Francisco por parte de monseñor Carles Seguí, Vadell prometió su cargo con el 'sí quiero' y se postró en el suelo, como marca la liturgia. Después de la imposición de manos por parte del cardenal y arzobispo de Barcelona, Joan Josep Omella, sobre Vadell y el que también será nuevo obispo auxiliar, el catalán Sergi Gordó, el sacerdote mallorquín recibiólos símbolos episcopales: los evangelios, el anillo, el báculo y la mitra.

Al finalizar la liturgia de la ordenación, Vadell recorrió la nave de la Sagrada Familia bendiciendo a los feligreses. Para acompañarle e en la bendición, los dos sacerdotes que eligió fueron el prefecto para la Doctrina de la Fe, hombre de la máxima confianza del Papa Francisco y también mallorquín, el jesuita Luís Ladaria, y al administrador apostólico de la Diócesis de Mallorca y previsiblemente obispo de la isla en breve, Sebastià Taltavull. De esta forma, aunque se tratará de la ordenación de los obispos de Barcelona, la Iglesia mallorquina tuvo un enorme protagonismo en la ceremonia, la primera ordenación que acoge la Sagrada Familia.

Nombramiento inminente

Vadell, con 45 años, se convierte en el obispo más joven de España y en el primer obispo mallorquín en 50 años. El sacerdote Miquel Moncades fue el último miembro de la Diócesis de Mallorca ordenado obispo, en el año1968.

Esta ordenación poco después del nombramiento del jesuíta Ladaria en uno de los cargos de más peso dentro de la estructura del Vaticano, han sido recibidas con gran satisfacción por la Iglesia mallorquina, que desde hace años no alcanzaba a cargos de relevancia en la jerarquía eclesiástica, y llega en un momento en que la Diócesis está marcada por la interinidad desde que hace un año el obispo Javier Salinas -presente en la ceremonia- fuera apartado fulminantemente por Roma por su conducta con su secretaria.

Después de un año de haber accedido al cargo de administrador apostólico para gestionar una Diócesis revuelta, se prevé que con la ordenación de Vadell, el nombramiento de Taltavull sea inminente. El prelado menorquín sigue siendo también obispo auxiliar de Barcelona. Los nombramientos de Vadell y Gordo responden, de hecho, a una petición del cardenal Omella, en quien el Papa Francisco ha depositado gran confianza en España, para cubrir la previsible baja de Taltavull. Ahora, su designación definitiva como obispo de Mallorca podría ser cuestión de días.

De la isla asistieron también a la ordenación de Vadell, el presidente del Consell de Mallorca, Miquel Ensenyat, la delegada del Gobierno, María Salom, y los alcaldes de las localidades en las que Vadell era parroco. El ahora obispo, natural de párroco, había sido hasta la fecha vicario para la Evangelización de la Diócesis de Mallorca y rector de la Unidad Parroquial de la Mare de Déu, que agrupa las parroquias de Inca, Mancor, Lloseta, Selva y Caimari. Precisamente, de estos municipios es de donde acudieron numerosos feligreses mallorquines.

"Me siento muy querido"

Vadell se dirigió a ellos, agradeciéndoles su presencia: "Quiero agradecer la presencia de tantos mallorquines. Os quiero mucho y me siento muy querido por todos vosotros", expresó emocionado el prelado en su intervención junto a Gordó. "Esta ordenación nos desborda y ha trastocado nuestros planes. Nos desborda el amor de Dios y estamos satisfechos", confesó, para zanjar que "como dice el Papa Francisco, los obispos no son técnicos ni políticos, son pastores y estamos aquí para serviros a vosotros".

Vadell fue vicario de la parroquia Ramon Llull (1998-2006), rector del seminario menor (199-2006) y delegado para la Pastoral de la Vocaciones y formador del seminario mayor (2002-2006). También fue vicario parroquial de las parroquias de Sant Josep Obrer y del Corpus Christi, y responsable pastoral en los respectivos colegios parroquiales (2009-2014); y delegado de Pastoral Catequística y Litúrgica (2009-2013).

El obispo mallorquín se estrenará hoy junto a Sergi Gordó oficiando la misa dominical de la basílica de Santa María del Mar de Barcelona. El próximo sábado 16, Vadell oficiará una misa de agradecimiento por el apoyo recibido en la Catedral de Palma.