Gran parte de Mallorca quedó ayer teñida de blanco a raíz de la intensa nevada que se posó por toda la isla, fijando la cota de nieve en los 100 metros. La nevisca que cayó sobre las 14 horas, la hora más crítica, no llegó a cuajar en Palma. No obstante, en muchos puntos de la Serra de Tramuntana se llegaron a acumular entre 15 y 20 centímetros de nieve y el Consell tuvo que cerrar ocho carreteras de la Serra.

Las temperaturas más frías se registraron en Lluc y Alfàbia, donde los termómetros se desplomaron hasta los cinco grados bajo cero. Las máximas no superaron los siete grados. En la Serra d'Alfàbia se registraron rachas de viento de 111 kilómetros por hora.

Los cortes de carreteras por la nieve acumulada provocaron muchos problemas en los accesos a la Serra de Tramuntana. Unos 300 coches estuvieron atrapados durante más de tres horas intentando acceder a Valldemossa durante la tarde de ayer. La cola de vehículos no empezó a disiparse hasta que apareció una máquina quitanieves del Consell que abrió una vía en la carretera. El departamento de Carreteras del Consell de Mallorca había dispuesto hasta nueve máquinas quitanieves, pero con las ocho vías cortadas tuvieron que trabajar a destajo durante toda la jornada para poder recuperar la circulación.

Tráfico cortado

Las ocho vías que tuvieron que cerrarse al tráfico fueron: la carretera de la Serra (Ma-10) fue cortada en ambos sentidos en los 43 kilómetros entre Fornalutx y Pollença. La nieve también imposibilitó el tráfico en las carreteras de acceso a Sóller desde Palma, tanto la del túnel (Ma-11), como la del Coll. (Ma-11A). Asimismo, hay que sumar las carreteras Palma-Valldemossa (Ma-1110), desde s'Esgleieta; la de Bunyola a Alaró (Ma-2100); Caimari-Lluc (Ma-2130); la que une la anterior con el monasterio de Lluc (Ma-2140) y la que conduce a sa Calobra (Ma-2141).

En localidades como Manacor, Muro, Sineu, Maria, Santa Maria y Alaró, entre otras, tuvieron que suspender las tradicionales Beneïdes de Sant Antoni a causa del frío y la nieve.