Technoedge Investments BV, sociedad con sede en Holanda y sin actividad, que Jorge Lorenzo habría utilizado entre 2006 y 2009 para cobrar algunos de sus contratos con Yamaha, con patrocinadores privados y con administraciones públicas como el Govern de Balears no se quedó ni un euro público de las islas. O eso documentan fuentes del Govern actual, que preguntadas por este diario salen al paso de una supuesta filtración de la web que en los últimos meses ha publicado los movimientos para eludir dinero al fisco de estrellas del deporte como Ronaldo, o Mourinho. Se trata de Football Leaks, cuyas revelaciones fueron empleadas ayer para que la publicación digital El Confidencial pusiese el foco sobre el piloto mallorquín.

"Jorge Lorenzo cobró publicidad en una firma pantalla en Holanda", titulaba el citado medio, en el que detallaban además que "Baleares pagó al piloto 120.000 euros de dinero público al año, en una sociedad sin actividad en los Países Bajos". En El Confidencial atribuyen esas subvenciones directamente al Govern del socialista Antich (2007-2011) y añaden en el subtítulo que "en muchos casos, Holanda es la parada camino de un paraíso fiscal".

¿Lo fue para Lorenzo? ¿Usó el piloto esa empresa como firma pantalla para desviar dinero a un paraíso fiscal? En el diario digital no se ofrece ninguna prueba al respecto. El Confidencial sí aporta la versión de Lorenzo a través del abogado del piloto mallorquín, Iván Zaldua, que afirma que la sociedad holandesa está cerrada y disuelta, y que Lorenzo regularizó sus cuentas con Hacienda después de la inspección que se le hizo en 2009 y 2010 a su sociedad española FMT Land 99 S.L..

Esa empresa es de hecho la que utilizó el piloto después de renunciar a los servicios de su anterior representante, Daniel Amatriaín, y de paso desactivar su relación con la sociedad en Holanda. Todo esto ocurrió en 2008 y 2009, y está documentado en los registros del Govern, en cuyo departamento de Deportes revisaron ayer lo ocurrido entre 2007 y 2009, con Mateo Cañellas, de la extinta Unió Mallorquina (UM), como conseller de Deportes.

Concretan que el 15 de mayo de 2008 el Govern y el piloto firmaron un patrocinio de 120.000 euros, a pagar en dos plazos. A cambio Lorenzo hacía lo que igualmente hace, cobre o no: llevar el nombre de Balears por todo el mundo, en este caso con una publicidad incorporada a su mono. Ese acuerdo generó controversia interna en la Conselleria y en la Fundación Illesport, encargada de darle forma al acuerdo: se debatía si se podía pagar una subvención a un deportista concreto a través de una sociedad en otro país, por mucho que ese otro país sea un socio de la Unión Europea como Holanda y la sociedad sea perfectamente legal. Ese análisis retrasó meses el pago, confirman fuentes de aquel Govern. Tantos meses se demoró el abono que cuando se produjo Jorge Lorenzo ya no llevaba sus negocios y cobros a través de la empresa holandesa Technoedge Investments BV, la que había firmado el acuerdo a favor del piloto con el Govern.

Esa desvinculación de Lorenzo explica lo que ocurrió después. El 2 de abril de 2009, casi un año después de la firma del acuerdo, la Fundación Illesport transfirió 60.000 euros a la compañía holandesa, que cinco días después, el 7 de abril, los devolvió al Govern. Según detallan además en la actual la Dirección de Deportes, el 15 de junio de 2009 la empresa holandesa firma una renuncia contable a cobrar esos 120.000 euros.

¿No quería Lorenzo el dinero? Pues tampoco es eso: en septiembre de 2009, el piloto reclama los 120.000 euros a través de su nueva firma, la española FMT Land 99 S.L., pero el Govern le responde que no pueden pagarle, porque el acuerdo es con su sociedad holandesa. El Ejecutivo se aviene a firmar un nuevo convenio con FMT para 2009 y 2010, por un valor total de 117.000 euros. Según los registros del Govern, en 2010 abonaron 57.000 euros.

El dinero sale de las arcas de Balears y acaba en una empresa española, un año y medio después de que el Govern del Pacte entre PSIB, PSM y UM hubiese aceptado abonar dinero a Jorge Lorenzo en un sociedad extranjera, en vez de ingresárselo directamente al piloto como persona física, como prefiere la Agencia Tributaria.

Subvenciones a dedo

Según fuentes que entre 2007 y 2010 estuvieron en el equipo de gestión de la fundación Illesport, a raíz de este caso el Govern optó por cambiar el sistema de reparto de subvenciones. Dicen que hasta entonces el proceso era arbitrario, se le daba dinero a quien el gobernante de turno quería: "No había criterios objetivos y lo cambiamos porque queríamos que esto fuese para sustentar la actividad de deportistas de alto nivel que necesitan apoyo para seguir sus carreras".

No era el caso de Lorenzo, con ingresos millonarios. Después de 2009, el Govern introdujo baremos para dar las ayudas, que limitan por ejemplo la subvención a un máximo de 60.000 euros al año para un deportista que sea campeón olímpico o del mundo.