Los proyectos de inversiones estatutarias en Platja de Palma que están en riesgo por la negativa del Gobierno nacional del PP a pagarlas, al no haber sido todavía ejecutadas, afectan a distintos proyectos viarios, de zonas verdes y pluviales por un total de 83 millones de euros. El vicepresidente del Govern, Biel Barceló, anunció el pasado viernes la decisión de llevar al Ejecutivo de Mariano Rajoy ante los tribunales por este asunto. En concreto, el Govern presentará un recurso para exigir los fondos estatales comprometidos para Platja de Palma. De los 83 millones de euros, Balears recibió 20, pero los utilizó para cubrir otros gastos y el ministerio de Turismo se niega a aportar el resto hasta que se justifique que la cantidad entregada se utilizó correctamente.
Las obras que están en el aire se refieren a intraestructuras viarias y urbanas, proyectos de rehabilitación y mejora del espacio urbano, mejoras de carácter medioambiental y de movilidad. En total, estos proyectos suman 83,5 millones de euros, de los que el Govern ha justificado hasta ahora aproximadamente unos 5 millones.
Las actuaciones en riesgo que suponen mayor cuantía económica se refieren a mejora del espacio urbano, con proyectos como corredores paisajísticos entre zonas, para los que estaba prevista una inversión estatal de 25,5 millones de euros. A ellos le siguen, en lo que se refiere a la importancia del montante económico que debe aportar el Gobierno central, los proyectos relacionados con infraestructuras urbanas, es especial los de canalización de redes pluviales y saneamiento, así como la mejora de la calidad de aguas marinas, para los que el Estado debía destinar 18 millones de euros.
En cuanto a la mejora medioambiental, las inversiones que están en el aire suponen un total de 12 millones de euros y afectan a proyectos como la adecuación del espacio libre en Ses Fontanelles y el canal de Sant Jordi, la adecuación del paseo marítimo y playas, así como planes de rehabilitación medioambiental en edificaciones turísticas hoteleras. Otros 12 millones que están en el aire se refieren a proyectos de rehabilitación urbana, como por ejemplo el de la recuperación ambiental y paisajística del Torrent dels Jueus y nuevos equipamientos.
El bloque de inversiones estatales en riesgo de que no lleguen a Balears se completa con 8,5 millones de euros que debían financiar proyectos de infraestructuras viarias, como mejoras de vías de acceso y carreteras, y otros 5 millones para la mejora de la movilidad con iniciativas como un plan de mejora del transporte público, una red de carriles bici o la implementación de la red eléctrica para vehículos. A estos proyectos se suman otros 2 millones para dirección, gestión y coordinación.
Amenaza del ministro Soria
El ministerio de Turismo no sólo se niega a aportar los 63 millones pendientes para Platja de Palma hasta que el Govern no justifique que los 20 millones que envió se utilizaron correctamente, sino que además amenaza con exigir al Ejecutivo balear la devolución de los fondos ya entregados y que no justifique con obras que debían estar ejecutadas antes del 13 de agosto de este año. De los 20 millones, el Govern sólo ha podido justificar aproximadamente 5, relativos a mejora de la canalización y red de pluviales de Platja de Palma, mejora de infraestructuras subterráneas, reparación integral de deficiencias, derribo de un hotel y adecuación del solar (en 2010 se derribó el Hotel Playa Náutico) y redacción de distintos proyectos.
La decisión del Govern de presentar un recurso contra el Estado se produjo días después de que Barceló y la presidenta Francina Armengol tuvieran un tenso enfrentamiento verbal en la World Travel Market con el ministro de Turismo, José Manuel Soria, quien afirmó en la feria turística londinense que obligaría a Balears a devolver el dinero que el Estado había entregado para inversiones en Platja de Palma.
Los 83 millones de euros estatales para esta zona forman parte de las inversiones estatutarias pactadas en 2008 por los gobiernos central y balear, a cuyo frente se encontraban entonces los socialistas José Luis Rodríguez Zapatero y Francesc Antich. Los fondos estatales para Platja de Palma quedaron comprometidos en un convenio firmado por las dos administraciones en 2009. Desde entonces y hasta mayo de 2011, cuando el Pacto perdió las elecciones autonómicas, el Govern de Antich recibió y gastó 20 millones de euros procedentes de este convenio, pero en lugar de destinarlos a proyectos turísticos los utilizó para cubrir gastos y suelos de la administración balear, que a la insuficiente financiación estatal sumaba una caída de ingresos a causa de la crisis.
Cuando el popular José Ramón Bauzá llegó al Govern en 2011, dejó el asunto como estaba, sin encontrar 20 millones para pagar las inversiones en Platja de Palma y poder así justificar al Gobierno central estos fondos. Sólo hubo para 5 millones y ahora el actual Govern del Pacto debe justificar antes de que acabe los 15 millones restantes en obras no ejecutadas. El viernes Barceló afirmó que "la vía política sigue abierta", aunque las negativas por parte del Gobierno central a todas las propuestas del Govern han llevado al final al Ejecutivo de Armengol a recurrir a los tribunales.
