El cierre de la asociación isleña de familiares de alzheimer (Afam), adelantado ayer por DIARIO de MALLOCA, ha generado una reacción inmediata desde los partidos de la oposición, que además de defender la labor que venía realizando esta organización han atacado con dureza a la consellera insular de Bienestar Social, Catalina Cirer, a la que han reclamado la dimisión. Sin embargo, esta última recibió ayer el apoyo del propio vicepresidente de Afam, Guillermo Mulet, el cual ha anunciado que cuando se reuna mañana con ella "será para darle las gracias por todo lo que ha intentado ayudarnos".
El anunció de que Afam ha presentado concurso de acreedores debido a la falta de ingresos y a las sanciones que el propio Consell de Mallorca le ha aplicado, que por el momento ascienden a 60.000 euros, ha sido lamentado por el PSIB-PSOE, Més y Esquerra Unida. El portavoz de los socialistas en la institución insular, Jaume Garau, calificó de "cómplice" al equipo presidido por Maria Salom por la supresión de las subvenciones que se daban a este tipo de organizaciones, y al igual que Jaume Palou, de Més, recordó el compromiso adquirido por Cirer de que dimitiría si desaparecía alguna de estas entidades. Desde Més se reclamó además que se cree una partida presupuestaria de dos millones de euros para la creación de subvenciones que garanticen la continuidad de las asociaciones dedicadas a la ayuda social.
Desde estos grupos, al igual que desde Esquerra Unida, se valoró el trabajo realizado por Afam. En concreto, desde esta última formación política se subrayó que el cierre de Afam supone una "perdida que la sociedad no se puede permitir".
Agradecimiento a Cirer
Pese a esas críticas, el vicepresidente de Afam, Guillermo Mulet, señaló que durante el encuentro que mañana va a mantener con Catalina Cirer se limitará "a darle las gracias por el apoyo que nos ha dado, sin hacer reproches", en relación a las reuniones que ya se han tenido con ella para abordar el abono de las sanciones aplicadas a esta asociación.
Mulet afirmó que incluso sin las multas que les ha impuesto el Consell por dar unos servicios en unos locales que no estaban adaptados para ello, la asociación de familiares de alzheimer estaba condenada a desaparecer debido a que en lo que va de año no ha recibido "ni un euro" por parte de las Administraciones públicas o de la obra social de las entidades financieras implantadas en el archipiélago.
Pero en este aspecto, señaló que ningún partido político, incluidos los de la oposición, se había preocupado hasta ahora de lo que podía suceder con Afam, pese a que sus problemas financieros eran conocidos.
