Tras casi 20 años ayudando a los familiares de enfermos de Alzheimer, la asociación que los representa en Mallorca (Afam) corre el riesgo de tener que cerrar sus puertas a causa de las sanciones económicas que le ha impuesto el Consell de Mallorca, según reconocen el presidente y el vicepresidente de la citada organización sin ánimo de lucro, Juan Enfedaque y Guillermo Mulet respectivamente. La multa de 60.000 euros que le fue impuesta en 2011 se puede ver ahora agravada por otra, después de que se le haya abierto un nuevo expediente sancionador.

Guillermo Mulet no oculta que la primera de esas sanciones, aplicadas durante la presidencia de Guillermo Ramón en Afam, estaba justificada dado que se había cometido la infracción que se les achacaba, pero lamenta muy especialmente el que ahora se les abra un segundo expediente por una cuestión meramente administrativa.

La primera de ellas, por una falta muy grave, se impuso por haber abierto un centro de día en unas instalaciones de la calle Fray Juníper Serra que no cumplían los requisitos para ello. La multa prevista en estos casos podía ir de los 60.000 a los 600.000 euros, y la que se recibió fue la más baja, además de tener que cerrar el citado centro de día.

Pero esos 60.000 euros de sanción suponen una losa para una organización que sobrevive a costa de ayudas públicas y que ahora se encuentra con un recorte durísimo en las subvenciones que recibe. Para hacer frente al pago de estas cantidades se ha diseñado un plan de pagos (se abonan 600 al mes) y se han presentado ocho proyectos a ayuntamientos y al propio Consell para prestar servicios, lo que podría suponer unos ingresos de 45.000 euros, lo que saldaría gran parte de esa deuda. Sin embargo, Guillermo Mulet reconoce que todavía no hay respuesta respecto a si esa inyección económica se producirá.

Segundo expediente

Pero esta situación se ha visto agravada ahora por la apertura de un segundo expediente. Tras abandonar el citado local de Fray Juníper Serra, Afam ha abierto un nuevo centro en la calle Rector Petro, en unas instalaciones que anteriormente habían sido municipales y que están adaptadas a las personas con dependencias al contar con rampas de acceso y baños adecuados, por citar algunos ejemplos. En este centro ha puesto en marcha un servicio de estimulación cognitiva, pero de forma paralela a la tramitación de los correspondientes permisos municipales antes de disponer del que emite el Consell de Mallorca. Al detectar esta falta de licencias, la institución insular ha abierto un segundo expediente, por falta grave, que podría conllevar una sanción de 12.000 a 60.000 euros.

Aunque desde la asociación de familiares de Alzheimer se da como seguro que en todo caso se les impondría la sanción más baja, de 12.000 euros, se reconoce que esta multa podría hacer ya inviable la continuidad de Afam, de ahí la preocupación de sus actuales responsables, especialmente si se tiene en cuenta que el expediente nace de un problema "perfectamente subsanable".

Desde el Instituto Mallorquín de Asuntos Sociales (Imas), dependiente del Consell, se confirmó la apertura de dicho expediente sancionador, aunque se añadió que todavía no se ha tomado una decisión definitiva sobre el mismo.

En este sentido, Mulet recuerda la labor de ayuda que Afam mantiene tanto a los enfermos de Alzheimer como a sus familiares, y los servicios de asesoramiento gratuito que se dan en el hospital de Son Espases y en Inca.