Los hoteleros que trabajan con el mercado español destacan que este segmento de turistas aun no ha tocado fondo. Mayo y junio se han caracterizado por un fuerte retroceso de visitantes, tal como pone de manifiesto Miguel Ángel Colom, director general de la cadena MLL Bay Hotels. Al margen de la crisis, Colom atribuye el hundimiento del visitante doméstico al elevado precio del billete de avión y al derrumbe de los turoperadores nacionales, caso de Orizonia. Según la gerente de la Federación Hotelera de Mallorca, Inmaculada Benito, el retroceso previsto para el turismo español ronda el 15%.