Los secretarios generales de los partidos socialistas de Balears, Cataluña y Comunidad Valenciana, Francina Armengol, Pere Navarro y Ximo Puig, respectivamente, presentaron ayer una postura común en defensa de una reforma constitucional que pase de un Estado autonómico que consideran agotado a un Estado federal que tenga unos planteamientos claros de financiación y delimitación de competencias entre el Estado central y las comunidades autónomas.

Este debate es necesario, planteó Armengol, cuando nos encontramos ante una crisis del modelo territorial por la actitud de un Partido Popular que, dijo la líder socialista, "retoma un papel recentralizador y persigue recuperar competencias cedidas a las comunidades autónomas. Frente a este modelo que rompe, nosotros queremos unir a través de una reforma constitucional que tenga en cuenta las especificidades de cada región".

Ximo Puig, de los socialistas valencianos, abogó por abrir un espacio de colaboración más potente entre estas tres comunidades para salir de la crisis y por apostar por "un futuro de convivencia y paz frente al escenario de confrontación en el que se siente a gusto la derecha".

Pere Navarro, primer secretario del PSC, denunció que los recortes del Gobierno Mas está provocando casos de malnutrición infantil al eliminar las becas de comedor, que la ley Wert discrimina a los alumnos en función de su disponibilidad económica, al tiempo que rechazó que su partido defienda otro modelo territorial sino tan solo "otra manera de organizarnos".

Asimismo, el líder catalán abogó por impulsar el corredor mediterráneo como alternativa beneficiosa no solo para estas regiones sino también para España y Europa. Pese a declararse públicamente republicano y abogar porque el Rey abdique, Navarro matizó que la reforma constitucional que ahora plantean los socialistas no entraría ahora en este debate (entre republicanos y monárquicos) para no dividir más aún a los españoles.

Los tres líderes políticos recalcaron que no escenifican ningún frente común contra otras posturas y sensibilidades presentes en el partido socialista y Armengol se mostró partidaria de mostrar un seny que el Gobierno de Rajoy no muestra frente al movimiento secesionista catalán. "El problema es de Mas y Rajoy, que hablan y se escuchan poco", estimó Navarro, que tan solo reclamó un cauce legal para hacer la consulta soberanista en Cataluña. "Lo único que ha hecho el PP ha sido reventar un Estatut de Autonomía votado por todos los catalanes", estimó el secretario general de los valencianos.