El juez ordenó ayer que se levantaran los embargos que pesaban sobre las propiedades inmobiliarias del matrimonio británico y sobre las cuentas bancarias y depósitos que sumaban más de 40 millones de euros.

El acuerdo entre las acusaciones y los abogados defensores no se firmó hasta que se comprobó que, una vez levantado el embargo, se abonaba al momento los impuestos que los imputados se comprometían a pagar. La mayor parte del dinero se abonó a través de la cuenta bancaria que estaba a nombre de Martha Hore. El juicio apenas duró unos minutos. Los tres acusados se limitaron a mostrarle al juez que estaban conformes con el acuerdo que habían alcanzado sus abogados, que suponía una fuerte inyección económicas a las arcas públicas.