¡Ay la grandilocuencia! A Gila se le habría abierto el pecho si escucha a Nájera hablar de sus planes de seguridad. Me explico: resulta que la calificadora y recalificadora de Playa de Palma está muy preocupada por la imagen de inseguridad de su reino, avivada por un despliegue digno de Gila: el corazón del turismo de masas está vigilado por un par de policías de Llucmajor, otros tantos de Palma, algún que otro guardia civil que pasa por allí y un puñado de nacionales. Son cuatro cuerpos sin una sola cabeza: unos no saben a qué andan los otros. Y Nájera lo quiere solucionar. ¿Cómo? Pues creando "un Estado Mayor de Playa de Palma". Ni más ni menos. Por si es la guerra, oiga. ¿Solución? Un señor con un teléfono. Más ambiciosos son los planes de futuro de Nájera: va a empezar a trabajar con Tui para perfilar la apuesta por el turismo sostenible y de calidad en hoteles de cuatro y cinco estrellas. Que 7.000 habitaciones sin baño son muchas. Incluso sin estado mayor.

La feria de la alegría espanta también a Delgado

El PP anda urticado con la ITB. El alcalde de Calviá también pasó como una sombra. Visto y no visto. ¿Demasiados datos positivos para el partido que ha elevado su "cuanto peor, mejor" al rango de programa? Quizá Delgado tenía prisa por las luchas intestinas de su PP en Calviá. No hubo tiempo de preguntarle en una feria en la que estuvo minutos. Algo más pararon Fiol y Flaquer, pero ni así aguantaron un día cerca de las buenas noticias. Más reticente a irse parecía Antich: el president seguía de presentación en presentación. ¿Ha visto brotes verdes en su campaña? Quizá su solución sea mudarse a Berlín hasta junio...

Mesquida, deportivo y deportista

Al mallorquín que dirige los turismos de las Españas se le quedó la misma cara que a quienes escucharon lo del "Estado Mayor". ¿La razón? A un cachondo se le ocurrió preguntarle ante 200 personas por los rumores que le sitúan como secretario de Estado para el Deporte. Primero abrió los ojos, luego los cerró y al final sonrió y fintó: "No comento rumores". De eso se encargan otros que ya le ven abrazando a Nadal en Roland Garros.