Durante los últimos nueve meses se ha concluido la construcción de 2.351 nuevas viviendas, una cifra que contrasta con las 7.143 terminadas durante el mismo periodo de 2006.

Un aspecto a destacar es que entre enero y septiembre de este año se han vendido unos 3.000 inmuebles de nueva construcción en la isla, lo que supone que se están logrando comercializar más de los que se ponen en el mercado, con el correspondiente recorte en el stock de pisos para los que no se encuentra un comprador.

Este dato es el que anima a los promotores isleños a vaticinar que a su actividad podría comenzar a reactivarse a partir de finales del próximo año, aunque para ello se reclama de los Ayuntamientos que hayan adaptado su planeamiento para evitar que los nuevos proyectos queden bloqueados.