El presidente del Govern, Francesc Antich, se ha mostrado satisfecho por haber podido llegar a un acuerdo con los funcionarios de Servicios Generales de la Comunidad y ha anunciado que ahora se hará una "profunda" negociación con los sindicatos de educación y sanidad "desde la humildad".
Antich ha adelantado en declaraciones a los periodistas, tras presentar una campaña autonómica contra el racismo respaldada por los principales deportistas de las islas, que espera "que (las negociaciones) fructifiquen en buenos resultados".
"Desde el Govern de las Islas Baleares tenemos efectivamente dificultades para poder cumplir los compromisos de 2010", ha reconocido el presidente, quien ha subrayado que, no obstante, el Ejecutivo tiene "los brazos totalmente abiertos" a garantizar el cobro de lo acordado con los trabajadores.
El objetivo del Govern en esta negociación es que los sindicatos tengan "total garantía de que los trabajadores recibirán las ayudas, el dinero y las iniciativas con las que se ha comprometido el Govern, por lo que solo se trata de trasladar a otro momento estas inversiones", ha puntualizado.
En este sentido, el jefe del Ejecutivo balear ha subrayado que ahora mismo la prioridad son las cerca de 80.000 personas que se encuentran en paro en la Comunidad, muchos de ellos ya sin prestación de ningún tipo y ha admitido que, en este sentido, los sindicatos y empresarios están colaborando estrechamente con el Govern.
El presidente ha manifestado que comprende que con los sindicatos de sanidad y educación el Govern tenía un compromiso, por lo que un aplazamiento sobre ellos requiere "una negociación profunda", ha concluido.
