El presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, afirmó esta semana que ve una necesidad de un cambio importante en la dirección económica de la UE. Desde Bruselas se pide un nuevo cargo, el de "superministro", el cual sea el encargado de dirigir la economía y las finanzas de la zona europea. Además, este dirigente sería vicepresidente de la Comisión y presidente del Eurogrupo. Su función, la de "promover reformas estructurales" y "coordinar las herramientas económicas cuando un Estado miembro entre en recesión o le golpee una crisis".