El Urbia Voley Palma cuenta sus partidos por victoria esta temporada. Ayer derrotó al FC Barcelona, líder hasta la fecha, por tres sets a uno. Los de Marcos Dreyer sumaron su tercer triunfo ante los 1.500 espectadores que vibraron en Son Moix y que, además, siguen sin ver perder a su equipo en Ciutat tras su ascenso a Superliga.

Los locales arrancaron arrebatándole el primer set de la competición al líder en un ajustado parcial que mantuvo la igualdad en todas sus fases. La manga se decantó tras 26 intensos minutos (25-21). En el segundo llegó la reacción barcelonista (20-25) con un parcial de siete puntos para auparles a tomar la iniciativa, 4-7, hasta lograr la igualada. Fue el mejor momento de los visitantes con un Di Betta que terminó con 21 tantos.

El Urbia Palma volvió a decantar la balanza a su favor con una gran remontada en la tercera manga que hizo levantar el Palau. Los hombres de Dreyer llegaron a ir perdiendo por seis puntos pero su reacción llegó a tiempo. La tanda de servicio de Nico Ronchi fue determinante para situar por delante a los locales que, aprovechando la tercera pelota de set, se anotaron un parcial clave tras media hora de lucha (27-25).

El conjunto palmesano, lanzado por la inercia positiva, pasó el rodillo por encima de los azulgranas. El 14-5 inicial fue incrementándose hasta la ventaja definitiva de trece puntos, en una manga express de veinte minutos, como colofón a la fiesta (25-12). El central Jorge Fernández (14 puntos) y el opuesto Nico Ronchi (13) brillaron deleitando a la grada.

Dreyer

Marcos Dreyer se congratulaba de la actitud de sus jugadores como clave "para reaccionar en el tercer set". El técnico del conjunto palmesano admitía que preveían "que no iba a ser fácil vencer al Barça" aunque reconocía que "el último set tampoco ha sido normal". El Urbia Palma ha vencido sus 16 partidos en Superliga como local, motivo por el cual el brasileño sonreía al afirmar que "el ambiente es un aliciente y ha contado mucho en la remontada".